Yolanda Díaz y Sumar seducen a más de uno. La ministra de Trabajo es una política a la que muchos tratan de arrimarse, dado que consideran que tiene una muy buena perspectiva de crecimiento en el futuro. Muchos la ven como la futura presidenta de España y tras el lanzamiento de su nueva plataforma, Sumar, muchas personalidades de la izquierda han llamado a la puerta de Yolanda Díaz para que les hagan un hueco entre sus filas. Aunque ella también ha ido tanteando a varios profesionales sobre los que piensa que podrían tener cabida en su plataforma. Así, la titular de Trabajó se acercó a Enrique Santiago para conseguir su objetivo de acabar de una vez por todas con Izquierda Unida. Este acercamiento ha enfadado y mucho a Ione Belarra, ya que se trata de su número dos dentro del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030. Tal es el malestar que ha provocado Yolanda Díaz, que la líder de Unidas Podemos ha decidido deshacerse de él y cesarle de cargo. De esta forma, la titular de Trabajo podría decidirse definitivamente a incluir en las filas de Sumar.
Desde hace mucho tiempo, Yolanda Díaz viene protagonizado el divorcio con Unidas Podemos. Ha llegado un punto en que parece que hasta le da urticaria o alergia el color morado. Y es que, hay cierto políticos de peso dentro de este partido que incomodan a la líder de Sumar. Se trata de pesos pesados dentro de la formación como Ione Belarra o Alberto Garzón, pero en especial Irene Montero. Su forma de trabajar y su maneras de hacer las cosas no casan lo más mínimo con Yolanda Díaz y a la menor ocasión posible se ha desligado de las decisiones promovidas por Unidas Podemos. Algo que ha aumentado el malestar entre Yolanda Díaz e Ione Belarra. A ello se suma el hecho de que la titular de trabajo decidió crear una nueva plataforma, con el fin de aunar bajo unas mismas siglas todo el voto de la izquierda y ya de paso quitarse de encima todo lo que tenga que ver con la formación morada.
enrique santiago contará con un papel predominante en sumar
Eso sí, no todos los miembros de Unidas Podemos disgustan a la política gallega. Hay una persona a la que lleva tiempo acercándose y tratando de convencer. Se trata de Enrique Santiago, una persona de confianza para Pablo Iglesias, pero ahora ostentaba un cargo dentro del ministerio que capitanea Ione Belarra. Era su número dos hasta ahora. A la líder de Unidas Podemos no le ha sentado nada bien el coqueteo entre Yolanda Díaz y Enrique Santiago, no le ha gustado nada que esta política tanteara a su mano derecha. Y ha decido cesarle, dado que solo quiere a su alrededor a gente de su confianza.
Una decisión que probablemente no disgustará demasiado a Enrique Santiago, ya que desde hace tiempo ha dedicado grandes esfuerzo a la nueva plataforma de Yolanda Díaz. Tanto es así que su cuenta de Twitter aparece como imagen de portada una fotografía junto a Yolanda Díaz. Que Enrique Santiago tendrá un papel predominante en Sumar es un secreto a voces. Ione Belarra lo sabe, es consciente de que Yolanda Díaz quería quitarle a su número dos y por este motivo ha decidido cesarle. Ahora, este cargo lo asumirá Lilith Verstrynge, una persona de la más estrecha confianza de la ministra de Derechos Sociales.
YOLANDA DÍAZ LLEVA TIEMPO TANTEANDO A ENRIQUE SANTIAGO
Todo se pega. Incluso ese rencor que tanto caracteriza al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. En este caso, es la vicepresidenta Yolanda Díaz la que ha utilizado a su viejo camarada Enrique Santiago para conseguir su objetivo de acabar de una vez por todas con Izquierda Unida. Para la ministra de Trabajo, Alberto Garzón es una lacra que ha lastrado el partido desde que tomó las riendas de la formación de izquierdas. Es por esto que la estrategia de Yolanda ha sido la de “seducir políticamente” a Enrique Santiago, íntimo de Pablo Iglesias, y conseguir así romper IU con la salida del Partido Comunista. Hasta ahora era su fontanero de confianza, pero desde que lanzó Sumar, ha dejado claro que Enrique tendrá un puesto predominante en su plataforma. Y Alberto Garzón no.
Enrique Santiago ha sido el fontanero de confianza de Pablo Iglesias. Él pertenecía a Izquierda Unida, pero su lealtad siempre ha estado con el cofundador de Podemos desde el mismo momento en el que le prometió una Secretaría de Estado. La confianza llegó hasta tal punto que Enrique Santiago le dejaba su casa en el norte de España a Iglesias y su entonces pareja, Irene Montero, para veranear. Sin embargo, este idilio cayó cuando el vicepresidente abandonó el Gobierno y se marchó fuera de la política. Fue entonces cuando el líder del PCE, integrado en IU, empezó a buscar un nuevo padrino (o madrina) que le acogiera en su seno y le permitiera seguir en un puesto relevante en el Ejecutivo. Y Sumar apareció como agua de mayo.