La Guardia Civil reserva los chalecos antibala para los veteranos mientras los jóvenes van a pecho descubierto

Las condiciones en las que trabajan los agentes de la Guardia Civil no dejan de empeorar y si se habla de jóvenes en prácticas recién salido de la academia la situación empeora todavía más. Y es que, la directora General del instituto armado no ha dejado de incrementar el malestar en la Guardia Civil con sus decisiones. Falta de uniformes, falta de limpieza, obligados a pagarse sus propias medallas o con coches de años más de 15 años. Estas son solo algunas de las situaciones que los agentes deben soportar. A esto se suma ahora la falta de chalecos antibala, los cuales escasean principalmente en la Comandancia de Madrid. Por este motivo, la Guardia Civil ha decidido reservar este material para los agentes más veteranos del cuerpo mientras los más jóvenes se ven obligados a ir a pecho descubierto.

La Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC) no ha dudado en denunciar esta situación y ha asegurado que la asignación individual de un chaleco antibalas es indispensable para los agentes. Sin embargo, su escasez lo han convertido en uno de los bienes más codiciados para lo alumnos del instituto armado, así como para muchos profesionales. Y es que, a pesar de que está activo el nivel 4 de alerta antiterrorista en España, la Dirección General de la Guardia Civil no considera como un asunto prioritario la protección vital de los agentes, destaca la asociación. Esta es una situación que están sufriendo los miembros de las unidades de la zona norte de la Comandancia de Madrid, quienes no tienen chalecos antibalas suficientes para suministrar a sus agentes más jóvenes. Así, los agentes de prácticas se ven obligados a prestar servicio sin la protección vital, dado que no hay existencias suficientes.

Los agentes de prácticas se ven obligados a realizar los servicios sin dicha protección

Y es que, la dotación de este material de protección por parte de la Guardia Civil es una cuestión obligatoria, según especifica el área de Prevención de Riesgos Laborales. AUGC ha afirmado que el instituto armado ha suministro chalecos antibalas a distintas zonas pero el área norte de la capital no ha sido una de ellas, ha quedado excluido inexplicablemente. Desde la asociación tampoco entienden que con las circunstancias que hay en la calle y ante un nivel antiterrorista tan elevado no haya suficientes prendas de este tipo, quienes llevan por bandera la premisa de «un agente, un chaleco». También resaltan que los nuevo agentes que se incorporan de prácticas no pueden «ser menos» que el resto de agentes y han destacado que ante la escasez de estos materiales, María Gámez debería darles un solución intermedia hasta que se les asigne uno individual.

Asimismo, han destacado que la vida de los trabajadores debería ser una prioridad. Sin embargo, han lamentado que los alumnos en prácticas, como los que están en las Unidades de la zona norte de la Comandancia de Madrid, se encuentran con «la triste realidad ya en sus comienzos». Así, una vez más los agentes de la Guardia Civil ven como sus condiciones continúan empeorando ante la inacción de María Gámez. La directora General del instituto armado y los agentes llevan tiempo en pie de guerra y con estas situación, la relación no deja de empeorar y tensarse todavía más.

NO ES LA PRIMERA VEZ QUE A LOS JÓVENES DE LA GUARDIA CIVIL LES FALTA MATERIAL

Los agentes de la Guardia Civil están muy cansados de María Gámez. Desde hace mucho tiempo la directora General del instituto armado y los agentes están enfrentados. Y es que, María Gámez ha ido mando una serie de medidas que no han sentado nada bien a los agentes de este cuerpo. Y no solo eso, sino que su inacción para hacer frente a los problemas de la Guardia Civil ha elevado todavía más el malestar dentro de las filas de este instituto armado. Ahora, ha ido un paso más lejos y es que ha obligado a los agentes de prácticas a buscarse la vida respecto a los uniformes con los que llevar a cabo los servicios. Se trata de una cuestión que han denunciado desde la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), quienes aseguran que han recibido las quejas de los agentes destinados en la Isla para hacer las prácticas por la falta de uniformidad. De esta forma, María Gámez ha obligado a los agentes a buscarse la vida e ir a Primark a comprar los uniformes cuando salen de la academia.

La AUGC ha asegurado que los agentes que se han incorporado a departamento de las Islas Baleares para realizar las prácticas disponen únicamente de una prenda para llevar a cabo los servicios. Así, ante la falta de uniformes para cambiarse, estos agentes se han visto obligados a comprarla ellos mismos para poder cumplir con los requisitos de vestimenta del instituto armado. Esto ha provocado que los agentes en prácticas tengan un sentimiento de “abandono”, ya que la María Gámez ni siquiera les ha dotado de uniformidad para prestar servicio.