Ante la falta de respuesta por parte del organismo encargado de la elaboración de los pasaportes en Venezuela, el Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (SAIME), por los errores en los documentos que llegaron en la última valija diplomática proveniente de Venezuela, las personas afectadas exigen a las autoridades venezolanas que se procure algún tipo de comunicación oficial con las autoridades españolas, para evitar que esta situación los afecte a la hora de hacer trámites migratorios.
Desde el pasado lunes han sido múltiples las denuncias de personas que han acudido al consulado venezolano en Madrid a retirar sus pasaportes y que al recibirlo se han percatado de que tienen errores en la fecha de nacimiento o en el lugar de nacimiento y la única solución que les han dado es entregar una certificación firmada y sellada por las autoridades consulares, que dice que hubo un error en el documento.
«Yo no sé si ese documento será válido para las autoridades españolas, pero cómo es posible que desde Venezuela nadie haya dicho nada al respecto. ¿Eso está pasando aquí en España o también le ha pasado a venezolanos que reciben sus pasaportes en otros países? No es posible que el Saime no haga una comunicación oficial para explicar por qué está ocurriendo el error, así como nunca dieron explicaciones cuando la página tuvo fallas», expresó Mariana, una de las venezolanas afectadas por los errores de impresión en los pasaportes.
Hay que recordar que en junio la página del organismo tuvo una falla que se prolongó por más de 20 días y la única explicación que ofrecieron, un día antes de solucionarlo, fue que se trataba de un «bloqueo tecnológico», sin dar mayores detalles.
Para muchos de los que recibieron el pasaporte defectuoso, después de estar esperándolo durante más de un año, el temor más grande es que la diferencia en los datos del documento los afecte para hacer sus trámites en las oficinas de Extranjería, pues al final este error no es atribuible a las personas, sin a los organismos venezolanos.
«Quizá para viajas no tengan ningún problema, pero lo que puede pasar es que si quizá los detiene la policía en algún procedimiento y al hacer la verificación de datos se percatan de que hay inconsistencias, entonces pueden pensar que están ante un caso de fraude o falsedad documental y eso es lo que puede generar inconvenientes legales a estas personas», explicó el abogado Juan Carlos Gutiérrez, socio del bufete Cremades & Calvo-Sotelo.
El jurista asegura que una alternativa posible para adelantarse a las consecuencias que esto podría traer a los venezolanos afectados por los pasaportes defectuosos, sería que en Venezuela, desde la Cancillería se enviara algún tipo de requerimiento al Saime, para que den una explicación oficial sobre lo que sucedió con esos documentos y que al obtener una respuesta, esta sea notificada a las autoridades en España, para que se enteren de la situación y la tengan en cuenta.
Sin embargo, para nadie es un secreto la ineficiencia que hay dentro de las instituciones venezolanas, tomadas todas por la dictadura de Nicolás Maduro, pues ya en España esta situación ha afectado a cientos de venezolanos que fueron judicializados porque sus licencias de conducir no cumplían con las condiciones de seguridad mínimas para ser reconocidas como válidas por las autoridades españolas.
Muchos de los que fueron reseñados por los cuerpos de seguridad españoles, al punto de que algunos han perdido la residencia en España por los antecedentes policiales. En el caso del pasaporte, es el documento de identidad más importante de cualquier inmigrante, pues es el que les sirve para ser identificado como originario de un país y para hacer los trámites que le permitan vivir de manera regular en cualquier otro territorio fuera de su país de origen.
Para la mayoría de las personas que se han visto afectadas por esta situación lo que más les causa molestias es que casi todos con los que este medio ha conversado tenían por lo menos un año esperando el pasaporte, pues desde que los venezolanos se han convertido en migrantes, obligados por la situación política y económica del país, poder obtener uno de estos documentos es todo un proceso que se dilata demasiado y que además es sumamente costoso, sobre todo para quienes lo gestionan en la propia Venezuela, donde el salario mínimo es de 23.6 euros mensuales.
«Ya no es solo que te cobran 280 euros para darte un pasaporte, que ya nos parece una exageración, y que tengas que esperarlo por un año; ahora entonces te mandan un documento defectuoso que no sabes si te va a servir para algo y la única respuesta que te dan en el consulado es ‘eso te sirve para viajar», comentó Adriana, otra de las venezolanas afectadas.