La situación de las enfermeras escolares: disponibilidad total y desinformación sobre fechas y destinos

La situación de las enfermeras escolares continúa empeorando. A menos de un mes para que de comienzo el curso escolar este personal sanitario encargado de velar por la salud de los niños dentro de los centros escolares todavía no han sido informados de las fechas ni los destinos para donde comenzarán a trabajar. Y no solo eso, sino que además se les reclama desde la Administración que tengan una disponibilidad total para cuando se decidan a llamarlas. Y es que, la situación laboral de las enfermeras escolares de la Comunidad de Madrid no deja de tensarse y empeorar. Contratos precarios, sin trienios y con escasos medios son algunas de las condiciones que sufre este personal sanitarios. Sin embargo, su situación está empeorando todavía más ya que a falta de 15 días, aproximadamente, para que comiencen las clases las enfermeras escolares desconocen cuando deben incorporarse a su nuevo trabajo y cual será el colegio en el que trabajarán.

Las enfermeras en España llevan años reclamando mejoras en las condiciones laborales, una situación que se agravó todavía desde que comenzó la pandemia. Sin embargo, si se habla de las enfermeras escolares el panorama es todavía más crítico y la cosa no deja de empeorar. Mientras los jóvenes estudiantes ya tienen marcado en sus calendarios cuando dará comienzo las clases y el nuevo curso escolar, es decir, cuando finalizarán las vacaciones de verano, para los sanitarios de los centro educativos es todo un misterio la fecha en la que deberán acudir a estos centros. Como muy tarde será el mismo día en que comiencen las clases, aunque probablemente deberían incorporar un poco antes de esta fecha para comenzar a preparar su nuevo lugar de trabajo, al igual que los profesores se incorporan antes para adecuar el material lectivo de las clases.

LA SITUACIÓN DE LAS ENFERMERAS ESCOLARES NO DEJA DE EMPEORAR

A ello se suma también el hecho de que deben tener una disponibilidad completa, ya que en cualquier momento les pueden llamar desde la Administración de la Comunidad de Madrid para que se incorporen a su nuevo trabajo. De esta forma, si las enfermeras pensaban disfrutar de unos días libres antes de volver al trabajo deberán hacerlo en un territorio cercano a la Comunidad de Madrid si no quieren perder su oportunidad. Esto se debe a que aquellas profesionales que haya pasado los procesos selectivos del SEPE, actualmente se encuentran cobrando una prestación o apuntadas como una mejora de empleo. Por este motivo, se les exige a las enfermeras escolares disponibilidad total, mientras continúan se encuentran totalmente desinformadas.

Y es que, a la situación que están sufriendo ahora respecto al nuevo curso escolar, se suma las condiciones y la odisea que supone ser enfermera escolar. No tienen responsable directo, se les deniegan días de libre disposición y su trabajo acaba en cuanto el centro lo decida. Todos estos problemas se unen a contratos precarios con horarios irrisorios comprometidos por la nueva reforma laboral que ha aprobado el Ejecutivo y que condena a los contratos temporales. Asimismo, este gremio carece de bolsa de trabajo específica, lo que significa que hasta ahora no había criterios para ocupar las distintas plazas en los centros, es decir, quien llegaba primero, da igual si con más o menos experiencia, era el que se quedaba en un determinado centro. A ello se suma la manipulación de la baremación del consejero de Educación de la Comunidad de Madrid, Enrique Ossorio.

ENRIQUE OSSORIO MANIPULA LA BAREMACIÓN DE LAS ENFERMERAS ESCOLARES PARA COLOCAR A AFINES

La situación laboral de las enfermeras escolares en la Comunidad de Madrid no es un jardín de rosas. Desde no contar con días de libre disposición hasta no recibir sus trienios pasando por contratos de obra y servicio con pocas horas. Las enfermeras escolares no están siendo reconocidas como debieran por la Consejería de Educación madrileña de la que dependen. Además, su plaza depende de una baremación totalmente subjetiva por parte de la consejería liderada por Enrique Ossorio que pocos conocen. De este modo, el consejero madrileño puede manipular esta baremación a su antojo y favorecer a ciertas profesionales respecto a otras. Además, estas enfermeras escolares permanecerán en vilo todo el mes de agosto esperando a que Enrique Ossorio les asigne o no una plaza en algún colegio. Eso sí, dicho centro tiene que contar con algún alumno con patologías, de lo contrario, no hay enfermera que valga. Así, Enrique Ossorio garantiza los derechos sanitarios de los niños y niñas escolarizados.

Las enfermeras escolares son un gremio que carece de bolsa de trabajo específica, lo que significa que hasta ahora no había criterios para ocupar las distintas plazas en los centros, es decir, quien llegaba primero, da igual si con más o menos experiencia, era el que se quedaba en un determinado centro. Asimismo, la Consejería de Educación madrileña establece una baremación que es la que te hace obtener plaza o no. Sin embargo, lejos de ser una baremación transparente, esta atiende a criterios subjetivos que dejan la puerta abierta a que el propio equipo del consejero pueda elegir a su criterio.