Tener humedades en casa es un problema muy común, especialmente en invierno y otoño. Más allá del apartado estético, el moho puede tener graves consecuencias en nuestra salud, siendo el motivo de algunas enfermedades como el asma, infecciones cutáneas e incluso migrañas. Además, puede generar graves daños estructurales en la vivienda, pudiendo afectar a paredes y muros. Por eso, es importante frenar el problema antes de que nuestra casa se convierta en un lugar totalmente insalubre.
Identifica el origen de las humedades
El origen de las humedades en una vivienda puede darse por tres causas fundamentales. La causa más común suele ser la condensación, que se produce sobre todo en climas más húmedos. La segunda causa más probable es la accidental, es decir, las provocadas por causas como, por ejemplo, la rotura de una tubería. En este caso, la humedad será localizada y no afectará al resto de la vivienda. Por último, están las humedades por capilaridad, que se producen cuando la vivienda se asienta sobre un terreno húmedo, y pueden traer consigo graves problemas estructurales. Si quieres saber cómo eliminarlas fácilmente, sigue leyendo.
Mejor prevenir que curar
La mejor solución para evitar un problema de humedades es la prevención. Un buen mantenimiento de las instalaciones de tu vivienda, como tuberías, platos de ducha y electrodomésticos como la lavadora o el lavavajillas es fundamental para evitar una fuga accidental que derive en un problema mayor. Por otro lado, si vives en un lugar con un clima muy húmedo asegúrate de que el aislamiento de tu vivienda es el adecuado y recurre a un aparato deshumidificador para controlar la condensación. En el caso de la humedad por capilaridad, será necesario recurrir al uso de impermeabilizantes químicos para los cimientos.
La ventilación, la mejor aliada contra las humedades
Una correcta ventilación en todas las estancias de la casa es la mejor solución para terminar con las humedades y evitar que se generen nuevas. Tener las ventanas abiertas diez o quince minutos al día bastará para frenar el problema. Por otro lado, las calefacciones excesivamente altas pueden suponer un problema añadido en espacios que permanecen demasiado tiempo cerrados, ya que la diferencia de temperaturas entre el interior y el exterior generará condensación. Por eso, es importante ventilar a menudo para evitar que esto ocurra.
El vinagre blanco para erradicar el moho
El vinagre es uno de los productos de limpieza más efectivos que existen. De hecho, el vinagre blanco es una de las mejores soluciones naturales para eliminar las humedades y el moho dentro de casa, incluso puedes utilizarlo en tu ropa. Para eliminar una humedad con este método, mezcla la misma cantidad de agua que de vinagre en un pulverizador y rocíalo sobre la superficie afectada. Después de 20 minutos, retira el producto con una bayeta. De este modo eliminarás la mancha y quitarás el mal olor.
Evita cubrir las humedades
Aunque las humedades puedan resultarnos antiestéticas, no es adecuado ocultarlas detrás de muebles y estanterías ya que el problema no solo va a seguir ahí sino que se agravará con el tiempo. El problema de tapar la humedad con cualquier superficie es que ésta impedirá la correcta ventilación de la zona, lo que no permitirá que la humedad se seque. En el caso de querer ocultarla puntualmente mientras esperas a arreglarla deberás dejar una separación suficiente entre la pared y el mueble para que pase el aire.
Utiliza bicarbonato de sodio
El bicarbonato de sodio es uno de los productos más utilizados en las rutinas de limpieza del hogar y puede ser una fórmula muy efectiva para terminar con las humedades por sus altas propiedades antifúngicas y de absorción. Además, actúa como blanqueante y elimina el olor a humedad de forma eficaz. Para aplicarlo, mézclalo con agua hasta conseguir una pasta espesa y déjalo actuar durante media hora. Al cabo de ese tiempo, retíralo bien utilizando un paño húmedo.
La lejía, una solución fácil para eliminar humedades
Utilizar lejía es una solución muy efectiva para erradicar las humedades en tu vivienda. Para ello, mezcla 250 ml de legía con un litro de agua y aplícalo sobre toda la superficie en la que se encuentre la humedad con la ayuda de un pulverizador y frota con un cepillo mojado hasta que la humedad desaparezca por completo. Se recomienda el uso de guantes para evitar que la piel entre en contacto con la mezcla y se pueda irritar. La lejía tiene un gran poder desinfectante y ayudará a quitar el olor a húmedo de la vivienda.
Evita tender la ropa dentro de casa
Tender la ropa dentro de casa es un gran error que debemos evitar a toda costa. En caso de que no quede otro remedio, es preferible dejar secar la ropa en una estancia en la que no vayamos a pasar mucho tiempo y, sobre todo, no hacerlo en el lugar donde dormimos. Si las condiciones de la vivienda obligan a hacerlo, se recomienda el uso de deshumidificadores. Tender la ropa dentro de casa no solo facilita la aparición de humedades en el hogar, sino también en la propia ropa, provocando un olor desagradable que será muy difícil de eliminar de las prendas.
Consecuencias de no quitar las humedades
Los dos principales peligros de no quitar las humedades de una vivienda son los problemas estructurales y las graves consecuencias que tienen para nuestra salud. Si dejamos que la humedad que aparece en una pared siga extendiéndose por toda a casa, ésta podría llegar a afectar a la estructura interna del edificio, generándole serios daños. Por otro lado, el moho puede generar graves problemas respiratorios y alergias. Además, está relacionado con el surgimiento de enfermedades reumáticas o con un agravamiento de las mismas en personas que las padecen.
Nivel de humedad recomendado en el hogar
El nivel de humedad recomendado en el interior de una vivienda es de entre un 30% y un 50%, dependiendo de la temperatura exterior. De este modo, en verano necesitaremos un nivel de humedad mayor que durante el invierno. Dependiendo del clima en el que vivas, puedes ayudarte con un humidificador o con un deshumidificador para regular los niveles de humedad de la vivienda.