Cuando llega la noche, nuestras defensas bajan y apenas nos apetece comer. No es recomendable irse a dormir con el estómago vacío, pero el cansancio no nos permite estar en nuestros cinco sentidos para preparar algo sustancial. Es entonces cuando recurrimos a comida chatarra o terminamos comiendo siempre lo mismo. Para que salgas de apuros en esas noches donde no sabes qué cocinar, pero quieres irte a la cama ligerito o ligerita, te dejamos la receta de la crema de boniato. Una cena sabrosa, ligera y que no te dejará con hambre.
6Tercer paso de la crema de boniato: especias

Lo que diferencia a un plato gourmet de uno común, además de su exquisita presentación, es la forma de condimentar. Selecciona y preparada las especias con las que vas a aromatizar tu plato. En la receta que te exponemos en esta oportunidad, hemos solicitado sal, pimiento y media cucharadita de jengibre, pero puedes estipular los que creas conveniente según lo que tengas en casa. El jengibre le da un toque picantito riquísimo, pero no te conviene abusar, ya que podría ser demasiado y echar a perder la mezcla. Cuando veas que a las verduras les queda poco, añade las especias y mezcla con el resto de los componentes.