Podemos «se arrodilla» ante Irene Montero y buscará disparar el presupuesto de Igualdad a los 800 millones

El Gobierno de Pedro Sánchez se encuentra inmerso en el diseño y la negociación de los próximos Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2023 que parece haber cerrado esta madrugada. Una negociación en la que Irene Montero se ha posicionado como uno de los claros «huesos duros de roer» ante el presidente socialista, exigiendo que se duplique el presupuesto actual del Ministerio de Igualdad contra la violencia machista, algo que aún está por determinar en el borrador, pero que fuentes de Podemos confirman. Se trata de una condición de la ministra podemita que no sólo condicionará su apoyo de cara a las negociaciones del los PGE, sino también el apoyo de toda la formación de Unidas Podemos.

Esta madrugada, Podemos y el PSOE han llegado a un acuerdo inicial para los Presupuestos Generales del Estado. De momento, no se han hablado de cifras, pero sí de algunas medidas concretas que son del agrado de los morados. La primera de ellas es que habrá una ayuda de 100 euros al mes para las madres con hijos de cero a tres años. También contemplan una mejora sustancial de las prestaciones por desempleo además de llevar adelante una Ley de Vivienda. Se espera que a lo largo de este martes se concreten las ayudas y algunas cifras más, pero el plato fuerte de momento se ha quedado en la cocina: Irene Montero quiere disparar el presupuesto de su ministerio.

A falta de pocos meses, ya se habla de que estos Presupuestos saldrán adelante en 2023. El PSOE está dispuesto y Podemos ha conseguido que Pedro Sánchez se pliegue a sus exigencias. Lo más curioso es que es Yolanda Díaz la que se ha sentado a hablar con el presidente pese a que Ione Belarra e Irene Montero tienen una agenda propia. Aún así, Unidas Podemos ha dado la imagen de estar aparentemente cohesionado y ha enterrado el hacha de guerra de forma puntual para intentar rascar algunas concesiones.

«Estamos ultimando los detalles». Con estas palabras, la ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, ha asegurado ante los medios de comunicación que el Ejecutivo nacional se encuentra trabajando para llevar al Consejo de Ministros, cuanto antes, el texto de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2023. Una «presentación» del documento que, tal y como ha asegurado la socialista, aún está pendiente de «algunos flecos», que podrían retrasar el documento de las cuentas públicas. Eso sí, Rodríguez ha querido señalar que estos flecos representarán el compromiso del Gobierno «con la estabilidad política y económica» y, ante todo, que estos PGE estarán «en tiempo y forma».

Unos «flecos» pendientes de las cuentas públicas para el año 2023 que dependen, en gran medida, de la negociación del PSOE con su socio de Gobierno, Unidas Podemos. Y, en especial, de Irene Montero, que parece estar dispuesta a condicionar los Presupuestos nacionales a las «necesidades» de su Ministerio de Igualdad.

IRENE MONTERO QUIERE MÁS DINERO PARA DAR EL «SÍ»

Así pues, la ministra podemita parece haber dejado claro que al PSOE no le saldrá «barato» contar con su «sí» en los próximos Presupuestos para 2023. Y es que Irene Montero no ha dudado en exigir el incremento de más de 200 millones de euros para su departamento. En concreto, para sus proyectos contra la violencia machista.

Actualmente, y tal y como reflejan los PGE de 2022, el Ministerio de Igualdad de Irene Montero cuenta con un presupuesto de 525 millones de euros. Una cifra que aumentaba en comparación con 2021 en un 14,4%, haciendo que, por primera vez, la cartera de Igualdad superara los 500 millones de euros de presupuesto estatal. Una cifra de la que prácticamente la mitad está destinada a políticas contra la violencia machista.

Sin embargo, parece que estos 525 millones de euros no son suficientes para satisfacer a Irene Montero, que parece haberse acostumbrado a contar con un gran presupuesto para sus proyectos. Y es que, ante las negociaciones por los PGE, la podemita no ha dudado en exigir a Pedro Sánchez duplicar su presupuesto para la violencia de género.

Exigencias que harían que el Ministerio de Igualdad aumentase su presupuesto en 2023 hasta superar los más de 800 millones de euros. En concreto, Irene Montero contaría con un presupuesto aproximado de 810 millones de euros. Una cifra que supera con creces el presupuesto que la cartera de la podemita manejaba en 2020, de cerca de 180 millones de euros.

PODEMOS SE DOBLEGA ANTE LAS EXIGENCIAS DE IGUALDAD

Una desorbitada cifra que, sin duda, pondrá en un serio aprieto a Pedro Sánchez y a la parte socialista del Gobierno de cara a aprobar los Presupuestos Generales del Estado en 2023. No sólo por el «no» de Irene Montero, sino porque toda la sección podemita del Ejecutivo apoyaría este rechazo de la ministra de Igualdad a las cuentas públicas.

Y es que Unidas Podemos ha mostrado su absoluto apoyo a Irene Montero en sus exigencias ante el lado socialista del Gobierno. Un apoyo que se traduciría en un «no» rotundo al texto de los PGE por parte de todo el bloque podemita, de rechazar Pedro Sánchez el aumento de presupuesto para Irene Montero.

«Formación tortuga» de los de Unidas Podemos alrededor de la figura de Irene Montero que muestra el liderazgo de la ministra de Igualdad dentro de la formación morada. Una relevancia dentro del partido que supera, con creces, a la mostrada por otros ministerios podemitas, como es el caso del Ministerio de Consumo, que no parece ser relevante para los morados, al menos, en cuanto a las negociaciones de los Presupuestos se refiere.

Situación que hará que Pedro Sánchez y su equipo de Gobierno deban elegir, una vez más, entre la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado tal y como los han diseñado los socialistas, a riesgo de romper la coalición, o la de ceder a las exigencias de sus socios de Gobierno. Exigencias que, en el caso de los podemitas, se centran en el aumento del presupuesto de Irene Montero en casi 300 millones de euros, pero que podrían no ser las únicas.

Y es que los socialistas también dependerán de las exigencias que hagan otras formaciones de las que depende el Gobierno, como es el caso de EH Bildu o ERC, que podrían también imponer sus deseos a los necesarios Presupuestos Generales, y sus preferencias económicas, a las necesidades de todos los españoles.