Patrimonio Nacional se encargará de que los funcionarios no trabajen «ni un minuto de más»

Conocido es que los funcionarios no tienen demasiado gusto por trabajar. Al menos, no más allá de su horario establecido, desde las 9 de la mañana a las 2 de la tarde. Una situación que ahora será «protegida» por Patrimonio Nacional, que no ha dudado en gastar fondos de las arcas públicas nacionales en «garantizar» el horario de los trabajadores públicos que dependen de su departamento, enmarcado dentro del Ministerio de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática de Félix Bolaños.

La intensa burocracia, como proceso de papeleo y cansancio ciudadano, está a la orden del día dentro de la administración pública española. Y es que pocos son los trámites que, a día de hoy, los ciudadanos españoles pueden realizar por su cuenta, debido a las complicaciones que presenta la administración pública española, apta para muy pocos entendidos. Así pues, muchos son los ciudadanos que, desesperados ante los líos burocráticos, deciden buscar ayuda en la administración pública y sus trabajadores para solventar sus problemas administrativos. Una ayuda que, sin embargo, resulta ser más complicada de encontrar que la propia solución a sus problemas administrativos.

Y es que, no sólo es realmente complicado conseguir una cita para acudir a las oficinas públicas en busca de ayuda, sino que, además, estas oficinas suelen tener un horario prácticamente incompatible con el del resto de trabajadores a nivel nacional. En concreto, desde las nueve de la mañana a las dos de la tarde; horas en las que gran parte de la población española se encuentra trabajando, siendo realmente un esfuerzo para muchos poder acudir a estas oficinas para solucionar sus solicitudes públicas. Un horario que no sólo está asentado entre los funcionarios públicos, sino que también parece ser defendido «a capa y espada» por las distintas administraciones públicas, que siguen apostando por el cuidado de los funcionarios, en detrimento de los intereses de todos los españoles.

PATRIMONIO NACIONAL «CUIDA» DE SUS FUNCIONARIOS

Una situación de «protección» de los funcionarios que ahora también incluye la gestión de Patrimonio Nacional, que parece estar más que dispuesto a encargarse de que sus trabajadores no trabajen «ni un minuto más de lo necesario». Al menos, dentro de las instalaciones. Algo para lo que el organismo no ha dudado en gastar dinero de las arcas públicas de todos los españoles, que también se encargan del pago de nóminas de estos funcionarios.

En concreto, el departamento de Patrimonio Nacional, dependiente del Ministerio de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática de Félix Bolaños ha lanzado un contrato de más de 50.000 euros públicos para mantener en funcionamiento el servicio de control de horarios de los funcionarios bajo su cargo. «Servicio de mantenimiento del sistema de control» destacan desde los documentos públicos a los que ha tenido acceso este diario. Un sistema que, tal y como exponen desde Patrimonio Nacional, está pensado para «el control de presencia» de los funcionarios en su puesto de trabajo; un control que ahora necesita un soporte «para el aseguramiento de la correcta operatividad del sistema».

Contrato para el que Patrimonio Nacional, y por extensión, el departamento de Félix Bolaños, ha estipulado una cantidad de 53.000 euros, que saldrán de las arcas públicas, estando el valor estimado del contrato en cerca de 120.000 euros, con posibilidad de prórrogas y otros «importes imputables». Contratación que, eso sí, está adjudicada a una PYME española, mostrando así la inclinación de algunos de los últimos contratos del Ejecutivo por beneficiar a las pequeñas empresas españolas en estos contratos públicos.

LAS POLÉMICAS CONDICIONES LABORALES DE LOS FUNCIONARIOS

Un contrato que marca la necesidad de Patrimonio Nacional por garantizar el correcto funcionamiento de sus servicios de información sobre los pases de los funcionarios durante sus horas de trabajo. Una necesidad que llega en un momento en el que la figura de los trabajadores públicos españoles está en el punto de mira; especialmente, por las últimas «iniciativas» que se han escuchado desde el Gobierno nacional, y que prometen ser nuevas ventajas para este sector laboral de España.

Tres millones. Es la cifra de trabajadores públicos funcionarios registrados en la administración pública española. Trabajadores que podrían contar con grandes beneficios gracias al Gobierno de España liderado por Pedro Sánchez, siendo uno de estos beneficios un nuevo incremento de salarios para todos los funcionarios, una de las principales exigencias de los sindicatos de estos trabajadores.

Requerimiento que no es el único que el Ejecutivo, a apenas un año de las elecciones generales y con los Presupuestos Generales del Estado aún sobre la mesa, estaría dispuesto a escuchar. Y es que los funcionarios, tal y como informaba Moncloa.com, también estarían presionando, a través de sus sindicatos, para conseguir una bajada en sus horas laborales, contemplándose alcanzar las 35 horas semanas, frente a las 40 horas (mínimas) de los trabajadores del sector privado. Exigencias que muestran, no sólo la falta de «ganas» de los funcionarios para trabajar, incluso dentro de sus horas establecidas, sino también la predisposición de las distintas administraciones públicas para agradar a estos trabajadores, gastando de las arcas públicas españolas, no sólo para seguir pagando sus nóminas, sino también para garantizar que no pasan ni un minuto más de lo debido en sus puestos de trabajo.