Tras la debacle política de la oposición venezolana, ya se comienzan a ver las consecuencias internacionales del cese de la actividad política de Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela. En el caso de España, quien hasta hace una semana fuera el embajador, Antonio Ecarri, emitió una carta en la cual da por finalizada la misión que desempeñaba desde enero de 2019, tras la decisión de la Asamblea Nacional del país suramericano, del pasado 30 de diciembre de 2022, que reformó el estatuto que regía la transición democrática.
La figura del gobierno interino en Venezuela quedó completamente diluido, al punto que los diputados de la Asamblea Nacional cerraron el 2022 decidiendo que había que ponerle fin a la «presidencia» que ostentaba Juan Guaidó, amparado desde 2019 en el artículo 233 de la Constitución de Venezuela y que por consiguiente, derivó en el nombramiento de un representante diplomático en España, cargo que ocupó el embajador Ecarri hasta el pasado 3 de enero.
El diplomático envió una misiva al Ministerio de Asuntos Exteriores, con quienes mantenía una cercana relación, a través de Antonio García Roger, secretaria de Estado para Iberoamérica y el Caribe, quien era la persona encargada de revisar todos los temas relacionados con Venezuela y la diáspora que se ha asentado en el país durante los últimos años, a consecuencia de la crisis económica y política originada por la dictadura de Nicolás Maduro.
«La representación diplomática del Gobierno encargado de la República Bolivariana de Venezuela, saluda al Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, para informar la conclusión de esta misión diplomática ante el Reino de España», señala el embajador Ecarri en la misiva que envió al despacho de José Manuel Albares, que ya desde hace un par de meses estaban coqueteando con el régimen de Nicolás Maduro y desde mediado de noviembre recibieron en el país a una embajadora enviada por la dictadura venezolana.
Quien hasta el pasado 3 de enero ocupara el cargo de embajador de Venezuela señala a las autoridades del Ministerio de Asuntos Exteriores que será la Asamblea Nacional del país suramericano quien continúe protegiendo los activos de la nación, a través de una Comisión Administradora de los bienes de la República y seguirá dedicando sus esfuerzos a la consecución de un camino democrático para Venezuela.
España había sido uno de los 52 países que reconoció al diputado Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela, tras desconocer las elecciones que organizó la dictadura de Nicolás Maduro en 2018 y que fueron cuestionadas por los organismos internacionales que sirvieron de observadores, que certificaron todas las irregularidades que hubo en el proceso, lo que originó que la Asamblea Nacional del país suramericano decidiera asumir el control del país.
Sin embargo, el poder siempre ha seguido en manos de la dictadura y la figura de Juan Guaidó como presidente interino, con la promesa de lograr una transición hacia la democracia no le ha servido a Venezuela, por lo que tras casi cuatro años de diatribas, algunos de los partidos políticos de la oposición optaron por acabar con la figura del interinato y nombrar una nueva directiva de la Asamblea Nacional que sesiona a través de videollamadas, pues el hemiciclo del país es ocupado por una Asamblea Nacional paralela que fue electa por el chavismo.
«Desde la representación diplomática del Gobierno encargado de la República Bolivariana de Venezuela ante el Reino de España, agradecemos la colaboración de todas las autoridades y aprovechamos la oportunidad para renovar nuestros sentimientos de alta estima y consideración» fue el cierre que el embajador Ecarri dio a la misiva que fue enviada al Ministerio de Asuntos Exteriores para dar por concluida la misión que había encargado el Gobierno interino de Juan Guaidó.
Entre los temas relevantes que se manejaron desde esta representación diplomática, durante los últimos casi cuatro años, estuvo toda la polémica del canje de los carnet de conducir de los ciudadanos venezolanos en España, que durante un largo período se vio envuelto en una serie de irregularidades, debido a la documentación que emitían desde Venezuela y que las autoridades españolas no consideraban válido, lo que ocasionó que una gran número de venezolanos fueran procesados judicialmente por presunción de falsedad documental, hasta que finalmente en agosto de 2022 España decidió cancelar, definitivamente, el canje del carnet de conducir de los ciudadanos venezolanos en el país.
Hasta ahora los ciudadanos Venezolanos en España solo habían podido atender sus temas de documentos a través de la representación consular de la dictadura de Nicolás Maduro en el país, pues la embajada que encabezaba el embajador Antonio Ecarri jamás fue capaz de tomar el control de la tramitación de documentos de los venezolanos que viven en el país.
