Emilio Aragón es una de las figuras más recordadas de los años 90. Todos aquellos que han estudiado un poco de aquella época en España o vieron la televisión entonces recuerdan su desempeño como actor, payado y mucho más. Estuvo al mando como presentador, guionista y protagonista de grandes éxitos de la pequeña pantalla. Todavía hay quienes lo reconocen como el mítico Nacho Martín.
8La clave para triunfar
Tras exponer estas palabras, acuñó que no podía dejarse llevar por el orgullo. “Sería injusto atribuirme el mérito. Yo he sido una persona afortunada porque a lo largo de mi carrera he colaborado en equipos que tenían las mismas inquietudes que yo. He tenido la suerte de vivir el nacimiento de las autonómicas, de las privadas, y éramos muchos los que pensábamos que se podía cambiar la televisión. Luego te das cuenta de que es más complejo, que hay un límite. Porque la carrera de cualquiera que esté en el mundo audiovisual, al igual que en otras disciplinas, depende de la sensibilidad que tengan tus jefes, de si tienen la suficiente para saber que hay que arriesgar para ganar. Y yo los he tenido”.
