La crema de calabacín es uno de los platos que mejor sienta cuando tenemos ganas de tomar algo suave. Siempre gusta y, al ser delicada, admite que le hagamos todas las variaciones habidas y por haber. Dependiendo de tus gustos, puedes añadir los condimentos que creas convenientes al plato. Te dejamos dos recetas que son para chuparse los dedos. Podrás hacerlas en cualquier momento con poco presupuesto y gozando de un sabor exquisito.
7Momento de utilizar el caldo reservado

Si ves que es necesario, incorpora también parte del caldo que has reservado hasta alcanzar el espesor deseado. Ya tienes listo tu parto, ahora es el momento de repartir. Pon la preparación en 4 platos hondos y sirve una cucharada de yogur y unas pipas de calabaza en cada uno. Da el broche de oro decorando con unas hojas de perejil. El secreto de toda buena receta es contar con ingredientes de calidad, consumiendo productos de temporada y cercanía.