El PSOE de Pedro Sánchez no da puntada sin hilo en su asalto a todas las instituciones. Ejemplo de ello son los sucesivos nombramientos realizados en los últimos días tras 20 días al frente del Gobierno. Uno de estos llamativos cambios se centra en la figura de Miguel Ángel Oliver, el exsecretario de Estado de Comunicación y nombrado ahora como presidente de la Agencia EFE.
La oposición del PP ha cargado contra este nombramiento al considerarlo un caso más de erosión de las instituciones llevado a cabo por el presidente del Gobierno. Asimismo, ha instado a cesar a Oliver «por respeto a los profesionales de EFE».
Sánchez no solo repesca a uno de los colaboradores más íntimos y cercanos, sino que será utilizado como herramienta de presión para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). Y es que, tras cinco años sin cambios en el órgano de gobierno de los jueces, el Gobierno del PSOE y Sumar tiene que realizar otra reforma en el Consejo de Administración de RTVE, para los que se necesita también el consenso entre los socialistas y el PP.
PEDRO SÁNCHEZ BUSCA EL CONSENSO TRAS OCUPAR LOS ASIENTOS
El consejo del ente público tiene que nombrar a seis consejeros el próximo mes de marzo y Miguel Ángel Oliver tendrá un papel clave a la hora de presionar en estos nuevos cambios. En este sentido, no se descarta que los consejos del CGPJ y de RTVE se pacten al mismo tiempo, aunque el PSOE ha mostrado sus prisas por renovar el primero lo antes posible.
En este sentido, Pedro Sánchez ha instado al PP a mantener una «mesa de trabajo» para negociar la renovación del CGPJ, pero sin fijar ni fecha ni hora ni tampoco la agenda de trabajo. Eso sí, ha abierto la puerta a debatir «otras cosas». El PP se ha negado en rotundo a aceptar este ofrecimiento, más tras el asalto de la agencia EFE por parte del Gobierno.
El Gobierno de Pedro Sánchez trata de cerrar así todos los altos cargos necesarios en el inicio de esta legislatura sin sobresaltos, evitando los escándalos que salpicaron numerosas elecciones, como el de Máximo Huerta, que tuvo que dejar el cargo tras destaparse un escándalo con Hacienda que llevaba años resuelto. También fue cesado Pedro Duque, escogido como ministro de Ciencia, como otros altos cargos durante la primera etapa en solitario de Sánchez.
LA LEALTAD DE OLIVER A PEDRO SÁNCHEZ
Según las fuentes consultadas por MONCLOA, los socialistas tratan de apuntalar el nombramiento de Elena Sánchez Caballero, presidenta interina del consejo de RTVE, y para ello es necesario ceder puestos a la oposición. Por esta razón, Sánchez ata la presidencia de la agencia EFE con un hombre de partido, pero sin carnet. La lealtad mostrada por Miguel Ángel Oliver desde 2018 es incuestionable. Muestra de ello son las formas utilizadas para cortar de raíz la actividad de los profesionales de los medios de comunicación en La Moncloa al dedicarles exabruptos como «insaciables» y «tertulianos».
De hecho, Oliver es conocido por sus malas formas. Cabe recordar que el propio Pedro Sánchez aseguró que manipular RTVE era equivalente a corrupción, pero el presidente del Ejecutivo ha incumplido sus promesas para despolitizar el ente público. Es más, lejos de ello, busca un mayor control para utilizar todos los altavoces disponibles, más allá de los micrófonos de La Moncloa.
Sonado fue también el despido de Fernando Garea al frente de la agencia EFE. El actual adjunto al director de El Español recibió su cese en una cafetería de manos del propio Oliver. Los reproches posteriores de Garea armaron un fuerte revuelo al señalar que «la agencia pública no es una agencia del Gobierno».
CUANDO OLIVER DESPIDIÓ A GAREA
El cese de Garea no fue con efecto inmediato, pero tenía atados los pies y manos a la hora de desarrollar la gestión. De hecho, según publicó en una carta solo podía «tomar decisiones urgentes y de pura gestión diaria». Para cubrirse las espaldas, mandó elaborar informes sobre la situación económica, de personal, jurídica, la de redacción y comercial para entregárselas al próximo presidente. Tan solo habían pasado 19 meses desde que llegara al cargo a la cúpula de EFE.
Los que tienen muy claro, ellos sí, que una agencia pública de noticias no es una agencia de noticias del Gobierno
En la misiva, Garea recordó a todos los profesionales, que tienen interiorizado el llamado estilo EFE, una mezcla entre precisión, rigor, credibilidad, neutralidad y pluralidad. «Los que tienen muy claro, ellos sí, que una agencia pública de noticias no es una agencia de noticias del Gobierno», sostuvo. «Repito y subrayo porque es oportuno: nos enseñan que una agencia pública de noticias no es una agencia de noticias del Gobierno, ni siquiera una agencia oficial», sentenció en la carta.
Oliver, además, ha formado parte de los medios más cercanos al PSOE, como La Ser y Mediaset. De hecho, estuvo al frente de ‘Noticias Cuatro’ fin de semana, fichó por el Gobierno de Pedro Sánchez después, y volvió de nuevo a la televisión privada.
