DeSantis se rompe ante Haley y allana el camino a Donald Trump

Ron DeSantis se rompe en las primarias republicanas ante el potente tirón de Nikki Haley, exgobernadora de Carolina del Sur. El candidato a liderar a los ‘elefantes’ estadounidenses ha preferido poner fin a esta carrera tras su pírrica victoria en los caucus de Iowa al obtener tan solo dos puntos por encima de Haley.

DeSantis no ha llegado a las decisivas elecciones de New Hampshire, previas a la batalla que tendría que lidiar en Carolina del Sur, donde Haley tiene el apoyo más que asegurado. Iowa ha sido la tumba política en esta guerra electoral de cara a las elecciones presidenciales del próximo 5 de noviembre.

La lucha de DeSantis no era frente a Trump, sino contra Haley, a quien no ha podido frenar en Iowa. Así, lejos de mostrar sus diferencias con Donald Trump, el gobernador de Florida ha dado su apoyo al expresidente de EE UU para liderar a los republicanos en 2024, aunque no descarta volver a la batalla dentro de otros cuatro años, en 2028.

DESANTIS SUCUMBE ANTE HALEY Y SE HUMILLA ANTE TRUMP

DeSantis prefiere entregar a sus votantes a un Trump que no ha dudado ni un momento en ponerle en su sitio en cada uno de los mítines y actos de la campaña. El preferido hasta ahora era «mojigato», un término que ha retirado después de que el candidato de Florida haya renunciado a la campaña.

Estoy orgulloso de haber cumplido el 100% de mis promesas y no voy a parar

«Suspendo mi campaña. Estoy orgulloso de haber cumplido el 100% de mis promesas y no voy a parar», ha afirmado en su despedida, por vídeo, un humillado DeSantis. «Tengo claro que la mayoría de los votantes de las primarias republicanas quieren darle otra oportunidad a Donald Trump», insistía.

Así, se deshizo en elogios hacia Trump, al considerarle «superior» a Joe Biden, el actual inquilino en la Casa Blanca, al tiempo que mostró su compromiso para el futuro aspirante a la presidencia de EE UU. «Tiene mi respaldo porque no podemos volver a la vieja guardia republicana de antaño, una forma reenvasada del corporativismo recalentado que representa Nikki Haley», destacó en un tono más rencoroso que conciliador.

TRUMP EVITARÁ LOS DESCALIFICATIVOS CONTRA DESANTIS

Tras estas palabras, Trump dejará de referirse al gobernador de Florida con el mote ‘DeSanctimonious’ -mojigato- y DeSantus -santurrón-, según ha afirmado en la cuenta de Twitter. Asimismo, también cesará en los continuos ataques hacia DeSantis, al que acusa de desleal y mala pronunciación. La altura de DeSantis también fue objeto de mofa, más cuando el gobernador ha empleado alzas para parecer más alto.

Donald Trump arrasa en las primarias republicanas
Donald Trump arrasa en las primarias republicanas

Desde Rochester, Trump continúa su campaña, llenando cada uno de los centros y dejando a cientos de personas fuera por la limitación de aforo.

Nikki Haley, por su lado, también ha dado buena cuenta de la retirada de DeSantis, a quien desea lo mejor tras su «gran carrera» política. No obstante, incluso en ese momento también hace campaña. «Dicho esto, ahora queda un tipo y una dama», ha recordado a 48 horas de la votación en New Hampshire, donde Haley solo perdería por unos 10 puntos, según los últimos sondeos, frente a los 30 que se dejó en Iowa.

IOWA, LA TUMBA DE DESANTIS

La brecha con Trump es prácticamente insalvable, pero quedan aún elecciones clave, como Carolina del Sur, que podría suponer un espaldarazo para quizá ver a una mujer al frente de la primera potencia occidental.

Junto a DeSantis también se han retirado otros candidatos, como Francis Suárez, alcalde de Miami; el exvicepresidente Mike Pence; el gobernador de Dakota del Norte, Doug Burgum; y el senador por Carolina del Sur Tim Scott. En Iowa, arrojaron la toalla Vivek Ramawamy y Asa Hutchinson. La mayoría de quienes se han retirado han optado por dar su voto a Trump antes que a Haley.

DeSantis era la gran esperanza para poner fin a Trump, inmerso en polémicas e investigaciones judiciales. Los sondeos apuntaban que sería el mejor candidato, que presentaría batalla, pero el papel todo lo aguanta. Lo único que cuenta son las papeletas de las urnas y Trump mantiene un apoyo de las bases cada vez más fuerte.

UN CANDIDATO SIN PESO

Pese a disponer de una gran suma de donaciones y apoyos millonarios a su campaña, su imagen fría y su falsa apariencia de cercano no encajaban con los votantes. De hecho, rehuía del cuerpo a cuerpo, aceptando con pasividad los insultos de Trump. En Iowa perdió por los 30 puntos, 50% para Trump y apenas 20% para su candidatura, a pesar de estar en una zona favorable y tradicionalmente conservadora.

«El éxito no es definitivo, el fracaso no es fatal: lo que cuenta es el valor para continuar», ha sostenido en su despedida, dejando así una ventana abierta de cara a otra posible batalla. Para entonces habrán pasado al menos cuatro años.