Otxandiano (Bildu) se acerca al PNV para gobernar el País Vasco

Los partidos vascos comienzan a moverse para fijar opciones en respuesta a lo que dicen las encuestas sobre las elecciones vascas que se celebran este año, y que con mucha probabilidad sean el 9 de junio, como está estudiando el actual lehendakari, Íñigo Urkullu. Los sondeos confirman que el PNV y EH Bildu están prácticamente igualados, siendo los socialistas vascos los que podrían tener la llave de la gobernabilidad, dependiendo a cuál de los dos socios de investidura de Pedro Sánchez decida apoyar.

Lo que no se esperaba el PSE-EE, que se encuentra estudiando cuál será el apoyo que más le favorezca a sus intereses, es que el candidato a lehendakari de EH Bildu, Pello Otxandiano, se haya adelantado con una oferta al PNV. La propuesta del candidato abertzale es simple: que gobierne la lista más votada y el que quede segundo cogobierne dentro de «una nueva política de colaboración». Es decir, que PNV y EH Bildu gobiernen juntos, dejando al PSE-EE fuera de esa ecuación.

Otxandiano considera que los socialistas vascos están tropezando con «excesivas dificultades para situarse en el nuevo tiempo». Los de Bildu por primera vez desde el pacto de investidura critican abiertamente al PSE-EE por defender posiciones como la que Vox mantiene en Baleares en materia lingüística. Este cambio en la formación de la izquierda abertzale se interpreta como la antesala de lo que se va a producir durante los próximos meses de campaña electoral hasta que se celebren los comicios en el País Vasco.

BILDU VA A SALIR A GANAR LAS ELECCIONES VASCAS

EH Bildu va a salir a ganar las elecciones vascas
EH Bildu va a salir a ganar las elecciones vascas

La razón, como ha explicado Otxandiano en una entrevista en Radio Euskadi, es que EH Bildu va a salir a ganar las elecciones. Una vez legitimados por el Gobierno de Pedro Sánchez ya no hay ningún complejo para ir a por todas. Esta es la razón por la que el candidato abertzale asegura que se van a presentar a las elecciones «con vocación de ser primera fuerza, y por tanto gobernar», aunque la última palabra la tendrán «los ciudadanos».

Otxandiano habla con convencimiento y con un discurso aseverativo y sin grietas: «Somos una fuerza política con vocación de gobierno y no se trata de alcanzar el poder por ostentar el poder, sino de ocupar responsabilidades de gobierno para poder traccionar procesos de transformación. Hace falta un empuje que ponga a este país en un escenario que se merece y es capaz de afrontar».

Bildu demuestra que ya ha pasado página de su pasado vinculado al terrorismo, y ahora quiere ofrecer una cara amable y moverse en la alta política. Por esto, su candidato quiere esparcir la confianza sobre su formación asegurando que «es bueno que EH Bildu participe en los gobiernos y se note su impronta en las políticas públicas».

En clave totalmente democrática, Otxandiano avanza cuáles pueden ser las posibles alianzas de su formación para la que «se está abriendo un nuevo tiempo en este país». Ese nuevo tiempo al que se refiere es a la normalización y legitimación que ha conseguido en el inicio de esta legislatura, que le ha llevado a cerrar alianzas con el PSOE en Navarra y Pamplona tras el pacto de investidura con Pedro Sánchez. Para el candidato abertzale son un «ejemplo» de lo que puede pasar también en el País Vasco.

BILDU DEFIENDE LOS «PACTOS INCLUSIVOS PARA NUEVAS FORMAS DE GOBERNANZA»

El dirigente vasco de Bildu ve en la actual situación de Euskadi «una ecuación política muy interesante». A su juicio, una vez excluida la derecha reaccionaria, lo que queda es un «espacio de colaboración entre las fuerzas progresistas donde gobierne la fuerza más votada». Y pone como ejemplo que en Navarra gobierna el PSN, por ser la fuerza más votada, y en Pamplona, EH Bildu, por la misma razón.

También el PNV «está en esa ecuación en Nafarroa, a través de Geroa Bai», con la que gobierna la formación soberanista en Pamplona. «Ese espacio de colaboración es una política nueva, una forma de hacer política no excluyente, que creo que hay que traerla también a estos tres territorios», ha dicho en referencia a la comunidad autónoma vasca, que ahora es «una excepción».

El candidato de EH Bildu tiene claro lo que se debe hacer: «Hay que normalizar la política y tenemos que pasar de pactos excluyentes a pactos inclusivos que respondan a los intereses y retos de este país, y a nuevas formas de gobernanza mucho más inclusivas». Y esto significa que en el País Vasco, si EH Bildu es la fuerza más votada, debe liderar el Gobierno vasco, y si la formación soberanista es la primera fuerza, debe ser la que encabece el Ejecutivo autonómico.

Tras este punto de partida, lo que queda después es «articular todo tipo de gobiernos de colaboración que puedan dar fórmulas de coalición con el apoyo de otra fuerza a la oposición desde fuera sobre un programa, una agenda de país transformadora y progresista.

Entonces, ahí el abanico puede ser muy amplio, y me parece que es una buena premisa que lidere la fuerza más votada», ha insistido, para incluir al PNV entre esas formaciones de progreso.

OTXANDIANO ADVIERTE AL PSE-EE QUE «EL GUIÓN EN EL PAÍS VASCO HA CAMBIADO»

Eneko Andueza deberá asumir que Bildu está dispuesto a pactar también con el PNV
Eneko Andueza deberá asumir que Bildu está dispuesto a pactar también con el PNV

Lo que todavía no despeja el candidato de EH Bildu es que papel puede jugar el PSE-EE liderado por Eneko Andueza. Pello Otxandiano reconoce que aún no ha hablado con el candidato de los socialistas vascos, aunque ya le adelanta que «se está abriendo un nuevo tiempo, y el guión ha cambiado y que hay que ser capaz de ajustarse o adaptarse a la nueva situación».

El cambio de guión a los que se refiere Bildu es que en el País Vasco «podemos llegar a gestionar el carácter plurinacional del Estado de una forma democrática, y eso exige que ese contexto también aterrice en la política vasca».

A los socialistas vascos solo les queda «adaptarse a la nueva situación», lo que para Otxandino no tiene por qué ser un problema. Y si es capaz de adaptarse a EH Bildu no le importaría apoyar a Andueza como lehendakari si es que el PSE-EE es el partido más votado. La única objetición que en estos momentos encuentra es la posición que el PSE-EE está teniendo en la cuestión lingüistica, lo que para Otxandino es una «anomalía».