Sumar al fin se democratizará con un Congreso fundacional fechado para el próximo 23 de marzo en el que decidirá su dirección, su estructura orgánica y alumbrará un documento político, ponencia política y estratégica, que está coordinado por los atareados Íñigo Errejón, que resucita la «transversalidad» tras asumir la portavocía del Congreso, y Marta Lois, candidata en Galicia.
«La batalla por la libertad es el gran combate ideológico de nuestro tiempo y Sumar asume la defensa de una libertad republicana que asegure las condiciones materiales que hacen posible el ejercicio de la ciudadanía, de la democratización de la libertad frente al privilegio de la huida de unos pocos, como brújula ética y política», señala el texto que se enriquecerá con la labor de grupos sectoriales de trabajo.
Dicen Errejón y Lois que «ninguna reforma puede ser más radical que esta democratización del tiempo y el espacio, pues la condición para acometerla (libertad para trabajar, jugar, beber, comer, leer, educar a los hijos, hacer deporte, cuidar un árbol, decir no, debatir una propuesta, dormir la siesta) es la democratización de la economía. La libertad deportiva, sexual, intelectual, social, cultural dependen de esa reforma pendiente».
ERREJÓN EVITA LA TERMINOLOGÍA CLÁSICA
Eso sí, la ponencia evita la palabra «izquierda» y apuesta por la «transversalidad» del primer Podemos pese a que reivindica como propios de la familia momentos de cambio como la II República, la Transición (gracias a la lucha antifranquista) o el 15M.
«Se trata de tres momentos constituyentes de las mejores posibilidades de nuestro pueblo. Son también los tres momentos que determinan nuestra situación actual, en la que nace Sumar como proyecto, y que nos indican cuáles son las tareas fundamentales todavía pendientes», añaden.
EL PCE TIENE PRISA
Amanda Meyer, responsable del Área de Convergencia e Institucional del Comité Central del PCE, y Ernesto Alba, secretario general del Partido Comunista de Andalucía, han mostrado su inquietud por la falta de democracia interna en Sumar en un artículo de reciente publicación.
Dicen que del fallido proyecto de Unidas Podemos, al menos en asuntos organizativos, saben «que la construcción de Sumar pasa por garantizar la máxima participación democrática de sus componentes. Actualmente, el proceso de consolidación de espacios democráticos de coordinación en Sumar, o no existen o van lentos».
El PCE cree que en Sumar deben aprender de los errores orgánicos de Sumar
«Desde el PCE, tenemos propuesta y queremos discutirla en igualdad de condiciones que otras organizaciones. Es importante que las organizaciones políticas que compartimos, o hemos compartido, coalición electoral en Sumar, pasemos del conflicto y la competición, a la colaboración, y eso pasa por crear espacios heterogéneos en su composición partidista, plurales en su caracterización ideológica y diversos en la composición de sus actores (partidos, movimientos y personas)», añaden.
ERREJÓN Y LACLAU
Hace trece años un joven Íñigo Errejón presentaba su tesis doctoral, ‘La lucha por la hegemonía durante el primer gobierno del MAS en Bolivia (2006-2009): un análisis discursivo’, en la que analizaba el exitoso modelo electoral de Evo Morales.
Morales y MAS, subrayaba Errejón, se habían convertido en «los catalizadores y representantes de una nominación radical: la de «pueblo boliviano», que es una identidad política generada por medio de la dicotomización conflictual del campo político, la representación de las élites como enemigas del interés general de la nación, y la operación metonímica por la cual los grupos sociales- particulares- indios y pobres- encarnan la voluntad general – universal».
Errejón se apoyaba en las tesis del filósofo argentino Ernesto Laclau para comprender cómo un grupo de dirigentes dirigidos por Morales, ‘ellos’, se había convertido en el representante de la mayoría de la voluntad popular, ‘nosotros’, con un mensaje que dejaba atrás el eje izquierda-derecha, casi siempre igualado en términos electorales, para utilizar el arriba-abajo, mucho más beneficioso para las formaciones políticas que defienden los anhelos de la mayoría social, véase las subidas del Salario Mínimo Interprofesional en España.
