¿Qué puede ser más reconfortante que una tarta de almendras casera? Esta delicia, inspirada en la receta de la abuela, pero con un giro moderno, se ha convertido en un clásico en muchos hogares. La combinación de almendras molidas, harina integral y el fresco toque cítrico del zumo de naranja crea una versión que ofrece beneficios adicionales para la salud gracias a su mayor contenido de fibra.
La inclusión de harina integral en la receta aporta un valioso aporte de fibra dietética, ya que conserva el salvado y el germen del grano de trigo. Esta fibra es esencial para promover una digestión saludable y puede contribuir a mantener niveles estables de azúcar en la sangre. Además, las almendras molidas, otro ingrediente clave de la tarta, son naturalmente ricas en fibra, lo que aumenta aún más el contenido total de este nutriente en la preparación.
Ingredientes para hacer esta tarta de almendras
La receta de la tarta de almendras casera con un toque de naranja y más fibra incluye 100 g de harina blanca y 75 g de harina integral para una base equilibrada. Para endulzar, se añaden 150 g de azúcar integral, mientras que 120 g de almendras molidas ofrecen textura y sabor. Los 3 huevos y una pizca de sal aportan consistencia, junto con 1/2 cucharadita de levadura en polvo para el aumento. El toque cítrico viene del zumo de una naranja y la suavidad del yogur cremoso (150 g). Para la cobertura, se necesitan 50 g de astillas de almendra tostada y 100 g de mermelada de naranja para un toque final irresistible.
Para preparar esta tarta de almendras, primero precalienta el horno a 150 °C y luego mezcla el azúcar con las yemas de los huevos, las almendras molidas, el zumo de naranja y el yogur cremoso hasta obtener una mezcla suave y homogénea. Luego, tamiza las harinas con la levadura y añádelas a la mezcla, asegurándote de obtener una masa uniforme que garantice una cocción perfecta.
La clave para que sea más esponjosa
El toque especial de la tarta de almendras llega al batir las claras a punto de nieve con una pizca de sal y luego incorporarlas con suavidad a la masa, proporcionando una esponjosidad única a la tarta. Vierte la masa en una tartera previamente untada en aceite y hornea durante aproximadamente 75 minutos, hasta que adquiera un dorado irresistible. Una vez lista, déjala enfriar sobre una rejilla para que conserve su textura esponjosa.
Para finalizar esta obra maestra, cubre la tarta con una generosa capa de mermelada de naranja y espolvorea encima almendras laminadas tostadas, agregando un toque crujiente y una explosión de sabor. Esta tarta de almendras casera, con su mezcla de ingredientes saludables y sabores exquisitos, es el postre perfecto para disfrutar en cualquier ocasión y deleitar a tus invitados con una verdadera delicia que además es muy saludable.
