Natalia, la mamá Chimpancé que recorrió el mundo, es la protagonista de uno de los videos más desgarradores de las redes sociales. El primate logró conmover hasta el más escéptico debido a su conmovedora actitud ante la muerte de su cría.
La chimpancé fue mamá al mismo tiempo que su hermana, pero su hijo no sobrevivió y decidió mantenerla con ella durante tres meses, por lo que esta escena logró cautivar a los fieles amantes de estas criaturas.
El duelo de la mamá chimpancé que emocionó a todos
Las imágenes de la chimpancé recorrieron el mundo e hicieron a este animal viral en redes sociales. Natalia tiene 21 años, vive en Bioparc Valencia y lleva casi tres meses sin poder desprenderse de su cría que falleció a los pocos meses de nacer.
Al parecer, este tipo de comportamiento es normal en los primates de esta especie y los especialistas explicaron el motivo de este arraigo que hizo emocionar a todos y aseguraron que esta actitud se da en los chimpancé que son “especialmente inteligentes”. Según reveló Miguel Casares, director del Bioparc, horas después de la muerte de su cría, Natalia estuvo acompañada por el papá de su hija y “estuvieron abrazados”.
La diferencia entre la inteligencia de un chimpancé y los humanos
El chimpancé y las especies de simios se destacan por una inteligencia similar a la de los humanos por lo que la actitud de Natalia tiene sentido. La diferencia que separa el ADN humano con el de estas especies es sólo del 5% y la manera que expresan sus emociones es casi idéntica. Es por esto que se dice que los primates tienen la capacidad de transmitir sentimientos como celos, envidia, tristeza, enojo, rabia y, además, entablar una conversación fluida con sus cuidadores, en caso de que sean especies en cautiverio.
El Instituto de Comunicación de Chimpancés y Humanos se ha encargado de estudiar estas especies y aseguran que un chimpancé y gorila pueden entender las palabras de sus cuidadores aún cuando no recurren a la mímica. Los simios tienen la capacidad de aprender el mismo lenguaje de signos que le enseñan a sus crías y los utilizan para poder “conversar” con quienes se hacen cargo de ellos. De todas maneras, la fuerza animal puede ante cualquier entendimiento y los simios impresionan con sus rasgos intelectuales pero su brutal fuerza, capaz de levantar hasta 500 kilogramos con un solo brazo.
