La sexta edición de los Premios MERCA2 y Fundación Marqués de Oliva han premiado a Rafael Catalá Polo con el premio MERCA2 al Impulso de la Cultura del Acuerdo. Catalá es un ex político y funcionario de carrera que pertenece al Cuerpo Superior de Administradores Civiles del Estado desde 1985. El premio fue entregado por José Luis Bonet, presidente de la Cámara de Comercio de España.
Catalá comenzó a ocupar varias direcciones generales con el triunfo de José María Aznar en las elecciones de 1996, ocupando los cargos de Subsecretario del Ministerio de Hacienda y Secretario de Estado de Justicia después.
En 2011, durante el gobierno de Mariano Rajoy, la ministra Ana Pastor lo nombró secretario de Estado de Infraestructuras hasta 2014. En 2016 asumió de manera interina la cartera de Fomento que dejó Ana Pastor para presidir el Congreso de los Diputados. Luego fue nombrado ministro de Justicia y notario mayor del Reino hasta 2018 cuando cesó pasando a la actividad empresarial privada.
Catalá recibió la medalla de honor que otorga la World Jurist Association en el año 2019. Desde ese mismo año es presidente de la empresa Belagua 2013, consejero de Legalitas Asistencia Legal SL y de ACHM Spain Management SL y presidente del Centro Español de Mediación (CEM), labor por la que obtiene el Premio MERCA2 al Impulso de la Cultura del Acuerdo.
El Centro Español de Mediación (CEM) es una herramienta útil para las pymes que buscan soluciones eficaces. Desde esa organización Catalá defiende las claves de la mediación como uno de los Medios Adecuados de Solución de Controversias (MASC) y su impacto en el sistema judicial español.
Catalá defiende la importancia de fomentar una cultura del acuerdo como alternativa eficaz a la confrontación judicial tradicional. La mediación no solo agiliza la resolución de conflictos, sino que también reduce costes y preserva las relaciones entre las partes involucradas.
Catalá explica en la página web del CEM que «el Centro Español de Mediación nace con la vocación de mejorar y ampliar los servicios que desde las cámaras de comercio se ofrecen al tejido empresarial español para contribuir a la mejora de su competitividad y para contribuir al bienestar general del conjunto de la sociedad. Tanto su organización como actividad están orientadas a prestar a los usuarios, y en particular a las empresas, un servicio de mediación excelente que ofrece una alternativa efectiva al proceso judicial y a la vía arbitral».
Y añade que «estamos firmemente convencidos de que la mediación es una herramienta indispensable para la mejora de la competitividad empresarial, desde el Centro Español de Mediación seguiremos dirigiendo nuestros mejores esfuerzos en ofrecer a los operadores económicos un servicio de mediación excelente que cumpla con los más altos estándares de independencia, imparcialidad y transparencia».
