El negocio de cabezas de lobo: 3.000 euros si lo matas por lo legal, 24.000 si eres furtivo

  • Uno de los cazadores también ha sido condenado a seis meses de prisión por tenencia ilícita de armas.
  • Los cazadores mataron al animal protegido en una finca de Tornadizos (Ávila).
  • Es una sentencia pionera, pero aún pueden recurrirla los acusados.
  • Matar un lobo en una finca, por muy ilegal que sea, no se ha resuelto con penas de prisión. Una multa de 24.000 euros ha sido suficiente para que estos dos cazadores paguen su deuda con la sociedad. Al mismo tiempo, los condenados tendrán que indemnizar a la Junta de Castilla y León con 9.200 euros, la misma administración que regula la caza de este animal al sur del río Duero y que permite cobrar hasta 3.000 euros por cabeza de lobo. El haber matado en 2015 a un lobo ibérico en una finca de Tornadizos (Ávila) cuesta poco más de 30.000 euros. Sin embargo, uno de los dos cazadores sí que ha sido condenado a seis meses de prisión pero por otro delito, el de tenencia ilícita de armas. Aún así, por sorprendente que parezca, se trata de la primera sentencia condenatoria en España por matar a un lobo, una especie protegida.

    El Juzgado de lo Penal número 1 de Ávila ha sido pionero, ya que no se ha impuesto una condena similar en los últimos años. Y con la ley en la mano, no han podido hacer mucho más que imponer una elevada pena a estos cazadores que se divirtieron en 2015 disparando a un lobo ibérico para, posiblemente, colgar la cabeza del animal en el salón. Los condenados responden a las iniciales de J. M. R. A. y J. L. G. E.

    El magistrado Mateo Jonathan Justicia Cuevas, aun así, ha apreciado el atenuante de dilaciones indebidas. Pero a pesar de ello, cada uno de los cazadores que mataron al animal tendrá que pagar una multa de nada menos que 24.000 euros e indemnizar a la Junta de Castilla y León con 9.200. Sobre el porqué de esta indemnización, vuelve la polémica, ya que es el importe en el que se ha tasado el valor de el animal abatido; es decir, que se supone que si la Junta hubiera vendido la caza de este lobo, hubiera ganado ese dinero.

    Uno de los dos cazadores ni siquiera tenía licencia de armas cuando abatieron en 2015 al lobo. Por este motivo, este delincuente ha sido condenado a seis meses de prisión por haber utilizado una escopeta en la montería sin haber cumplido los requisitos para usarla. Al mismo tiempo, la condena conlleva la inhabilitación especial para profesión u oficio e inhabilitación especial para cazar por tres años.

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    Los cazadores intentaron librarse de la condena a toda costa, al menos así lo refleja el magistrado Justicia Cuevas; pues entiende que los acusados no dieron detalles de lo ocurrido con “un contenido exculpatorio, de autoencumbrimiento y de encubrimiento mutuo, vislumbrándose una intencionalidad de no incriminación entre ellos”, tal y como se refleja en la sentencia. «Contenido que, a mayor abundamiento, fue parco o falto en detalles, de cómo se desarrolló el día de autos el acontecimiento de la montería-cacería que se organizó”.

    A pesar de los intentos de los condenados, tendrán que pagar una multa por haber matado a un lobo de forma ilegal, aunque aún sorprenda a sectores animalistas que haya una forma “legal” de hacerlo. El problema es que esta sentencia no es firme todavía y puede ser recurrida en apelación ante la Audiencia Provincial de Ávila, algo que previsiblemente harán los protagonistas de la montería ilegal.

    La caza es un negocio para la Junta de Castilla y León, así como para todos aquellos propietarios y gestores de los cotos que se lucran vendiendo las cabezas de algunas especies cinegéticas. Abatir ciervos, corzos o jabalíes cuesta dinero, pero la joya de la corona es el lobo, cuyo importe suele superar de media los 3.000 euros.