Aglomeraciones en Metro y Cercanías, un peligro de contagio del coronavirus

  • No hay restricciones de movilidad, solo se va a proceder a desinfectar y se recomienda no viajar innecesariamente.
  • Las aglomeraciones siguen viviéndose a diario en Metro, Cercanías y en los autobuses.
  • España ya ha cancelado los vuelos procedentes de Italia.
  • España ya ha superado ampliamente el millar de infectados por el coronavirus. Las autoridades sanitarias y gubernamentales están ampliando las medidas de prevención para evitar que la propagación del virus de Wuhan (China) siga extendiéndose por el país y se alcancen las cifras que ya hay en otros lugares vecinos como es el caso de Italia. El cierre de los centros educativos ha sido una de las más recientes, pero todavía hay otro focos de infección que no cuentan con un plan determinado para actuar contra la infección. Un ejemplo es el transporte público.

    La Comunidad de Madrid, una de las que más casos registra y donde hay más movimiento en este tipo de transporte, ya ha avanzado alguna de las posibles medidas que van a poner en marcha en una orden de Salud Pública. La principal se centrará en la desinfección de los vagones de Metro, todos los autobuses y también los coches de Cercanías. Las estaciones y el mobiliario también serán puntos a desinfectar. Otra de estas recomendaciones es evitar viajar siempre y cuando no sea imprescindible. Sin embargo, esto no parece ser suficiente, sobre todo, porque no evita uno de los mayores problemas y situaciones que más riesgo de contagio presentan: las aglomeraciones.

    AGLOMERACIONES EN METRO, CERCANÍAS Y BUS

    Vagones abarrotados, personas hacinadas y andenes hasta la bandera son algunas de las imágenes más habituales que se encuentran los pasajeros que frecuentan estos medios de transporte público a diario. Estas condiciones hacen muy difícil que las recomendaciones de prevención sean verdaderamente efectivas y se evite el riesgo real de contagio de coronavirus. Por ejemplo, es imposible mantener un metro de distancia entre personas como sugieren algunos expertos sanitarios. 

    El lunes a las 19.00 h de la tarde, tan solo minutos después de que el Gobierno de Madrid anunciara el cierre de colegios, institutos, universidades y centros de Formación Profesional, entre otros, uno de los vagones de Cercanías que conecta la capital con las zonas de la periferia mostraba una imagen preocupante. Para empezar, en los andenes de una de las estaciones más concurridas de la ciudad, como es Sol, los pasajeros estaban apelotonados esperando un tren cuya frecuencia de espera estaba cerca de los 10 minutos.

    En este tiempo, las vías se fueron llenando más y más. A la llegada del convoy la situación no mejoró. Ya venía abarrotado de personas y tras bajarse buena parte de los pasajeros, todavía hubo gente que no pudo subirse debido a la gran aglomeración que había en todo el tren. Una vez dentro, el espacio entre los usuarios era totalmente inexistente. Algunos de los presentes se quejaban de este escenario. “Todos los días igual, no hay derecho”, decía una mujer que apenas podía moverse de su sitio.

    Algunos usuarios, no demasiados, llevaban mascarillas –esta prenda, según los expertos, no es necesaria si no estás infectado, ya que el virus no se propaga por el aire–, otros estornudaban o tosían con timidez y a la vez cierto miedo a que el resto de pasajeros, con los que se rozaban hombro con hombro, les miraran con cara de preocupación. 

    Coronavirus
    Uno de los trenes de Cercanías Madrid abarrotados este lunes. Foto: MONCLOA.COM

    La situación en Metro y en autobús no cambia demasiado. También se siguen produciendo aglomeraciones diarias, sobre todo, en horas clave. Las autoridades todavía no han determinado si van a tomar más medidas, como las adoptadas en otros países en los que sí se ha restringido la movilidad para evitar la propagación del virus. A partir de hoy los centros educativos de forma oficial van a cerrar sus puertas y esto podría afectar al uso del transporte público. Algo que se observará en los próximos días.

    MEDIDAS DE OTROS PAÍSES POR EL CORONAVIRUS

    En China, el principal foco de infección y donde nació el coronavirus, el transporte público ha estado prácticamente cerrado, ya que las órdenes del Gobierno eran claras: nadie podía salir de sus casas. Las autoridades del país han controlado minuciosamente la movilidad y se ha aislado a los ciudadanos, paralizando, entre otras cuestiones, la actividad laboral. 

    En Italia, uno de los países europeos más afectados, también se han tomado medidas drásticas para frenar el avance del virus. Ya hay más de 9.000 contagiados y más de 460 muertos. El Gobierno italiano ha restringido la movilidad en todo el país. Antes solo se producían restricciones en las zonas con más riesgo de contagio, principalmente en Milán y sus alrededores, pero esto cambió el lunes. Este día se aprobó extender la norma a todo el país y los ciudadanos pueden moverse aunque pueden hacerlo por un motivo justificado. De momento los aeropuertos italianos fluyen con normalidad.

    El ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, ha confirmado la suspensión de todos los vuelos entre Italia y España para evitar que se expanda el COVID-19. Esta restricción se pondrá en marcha este miércoles y se extenderá hasta el 25 de marzo. En cuanto al transporte público urbano tan solo se llevará a cabo, por el momento, la desinfección de trenes, Metro y autobuses y ya se decidirá si más adelante se tomarán más medidas.