El Ministerio de Salud de Brasil ha notificado este martes que se han contabilizado 1.280 muertes nuevas, lo que significa que un total de 59.594 personas han fallecido en el país por la COVID-19.
Del mismo modo, las autoridades sanitarias han señalado que tras los 33.846 del último día, hay ya 1.402.041 casos acumulados, de los cuales 790.040 corresponden a pacientes que ya han logrado superar la enfermedad.
Por su parte, las cifras de la alianza de medios han revelado 1.408.485 casos acumulados y 59.656 fallecidos, tras contabilizar los datos de las secretarías estatales de salud.
El estado de Sao Paulo ha vuelto ha registrar cifras récord de fallecidos. Esta vez han sido 365 en las últimas 24 horas y 6.235 casos nuevos. En total, han muerto 14.763 personas, mientras que 281.380 han contraído la enfermedad.
Pese a las cifras, el estado se encuentra en plena desescalada, aunque la cuarentena fue prorrogada hasta el 14 de julio. Desde el pasado, la capital logró paso a la fase amarilla del semáforo epidemiológico, por lo que se permitió la reapertura de peluquerías, bares y restaurantes.
No obstante, los locales de hostelería estarán sujetos a horarios que no deberán superar las seis horas y sus instalaciones no deberán superar el 40 por ciento de su capacidad, ha informado la red Globo.
El horario de apertura de bares y restaurantes será hasta las 17 horas, pues tal y como han señalado las autoridades locales, «la noche genera más aglomeraciones y también reduce el cuidado de la población en relación con los cuidados de higiene».
Por otro lado, Río de Janeiro, la otra región más afectada por la pandemia, ha contabilizado 728 nuevos contagios, lo que supone un total de 112.611 casos acumulados, además de 10.080 muertes.
Si bien Sao Paulo y Río de Janeiro han comenzado con la desescalada, su estado vecino, Paraná, ha decretado un vuelta a las medidas de confinamiento más restrictivas debido al repunte de nuevos casos en los últimos días.
Bares y restaurantes, parques y espacios de recreo, así como pequeños comercios, volverán a cerrar y tan sólo estarán abiertos los servicios esenciales. El transporte público estará limitado para aquellos ciudadanos que se desempeñen en trabajos esenciales y las multas por incumplimiento de las medidas podrán alcanzar los 525 reales (88 euros) para las personas y los 10.500 reales (1.710 euros) para empresas.
De acuerdo con las autoridades, en los últimos 14 días, Paraná ha doblado sus cifras de contagio, pasando en tan solo dos semanas de 9.583 a 20.516 casos y de 326 a 586 muertes.