El Instituto Geográfico Nacional (IGN) ha detectado desde el pasado sábado y hasta este miércoles 310 terremotos en el entorno de las localidades de Atarfe y Santa Fe (Granada), siendo el de mayor intensidad el registrado este pasado martes a las 22,54 horas con una magnitud de 4,5, el cual llegó a sentirse en más de un centenar de municipios de varias provincias andaluzas e incluso en la de Murcia, según la información recabada de este departamento.
Pocos minutos antes, a las 22,44 horas y a las 22,36 del martes, se produjeron otros dos seísmos de magnitud 4,2 con epicentro en Santa Fe que también fueron ampliamente sentidos, sin que se hayan registrado heridos, aunque cientos de personas se echaron a la calle en las localidades afectadas asustados por estos temblores de mayor magnitud.
Desde ese momento y hasta las 6,40 horas del miércoles se sucedieron 40 réplicas con magnitudes inferiores a estas. Ya durante la mañana, las réplicas han seguido produciéndose aunque con magnitudes bastante inferiores. La más destacada en lo que va de jornada ha sido un terremoto de 3,0 con epicentro en Santa Fe que se ha sentido a la 13,06 horas.
Según consta en el último informe del IGN, desde el sábado 23 de enero y hasta este miércoles se han registrado 310 terremotos en esta zona, cuatro con magnitud superior a 4,0 y todos han sido fuertemente sentidos en numerosas localidades cercanas al epicentro, así como en la ciudad de Granada, llegando incluso a notarse en algunas localidades de las provincias de Málaga, Almería, Córdoba y Jaén.
Desde el 1 de diciembre de 2020, cuando se estima que se reactivó la serie sísmica en la que se enmarcan estos terremotos, hasta ahora se han calculado un total de 416 seísmos en la zona, de los cuales 14 son de magnitud mayor o igual que 3,0 y 55 han sido sentidos por la población.
ZONA SÍSMICA
La sismicidad registrada es habitual en esta zona, que se enmarca dentro del sector central de las cordilleras Béticas, una de las regiones con mayor actividad sísmica de la Península Ibérica, fruto de la convergencia entre la placa Africana y Euroasiática una velocidad de unos 4-5 milímetros al año.
En la provincia de Granada han ocurrido importantes terremotos a lo largo de la historia, siendo la cuenca de Granada la más activa sísmicamente. El más antiguo del que se tiene constancia ocurrió en 1431 al sur de Granada que tuvo una intensidad macrosísmica de VIII-IX produciendo grandes daños en la Alhambra y el más virulento el de 1884 en Arenas del Rey, que alcanzó una intensidad de IX-X produciendo 839 víctimas mortales.
También destacan los terremotos de 1531 en la cuenca de Baza con intensidad VIII-IX y el de 1804 en la cuenca de Dalías con intensidad VIII-IX, que produjo gran destrucción en Dalias, Berja y Roquetas y 407 víctimas.