Cuando llegamos a la etapa de la adolescencia, nuestro cuerpo comienza a experimentar cambios que nos acompañarán durante el resto de la vida, como los que podemos ver en este estudio. Crecemos, ganado altura, sudamos más, lo que puede ir acompañado de un intenso olor corporal o, en el caso de los chicos, cambia también la voz. Esta revolución de hormonas puede ir acompañada del molesto acné juvenil, tan fácil de aparecer y complicado de combatir.
A todos los jóvenes, sin importar su género, les puede suceder. Hablamos de una alteración de la piel que puede ocasionar la aparición de espinillas y granos. Estos se pueden convertir en un auténtico problema. Sobre todo, si no los sabemos tratar de la forma adecuada. Tanto, que puede que perdure durante más tiempo y lo sigamos teniendo también en nuestra etapa de adultos.
Si no quieres que esto suceda, descubre algunos consejos para deshacerte del acné juvenil lo antes posible.
1Qué es lo que provoca la aparición de acné juvenil
Las causas de aparición del acné juvenil pueden ser diversas. Estos factores están íntimamente relacionados con los cambios ocasionados durante la adolescencia y también durante la juventud. En esta etapa, nuestras hormonas aumentan, lo que hace crecer también la sustancia conocida como sebo cutáneo. El exceso de la misma, provoca una obstrucción de los poros, que se pueden infectar. Esto provoca la hinchazón y enrojecimiento de la zona, apareciendo el grano.
Otro de los factores que debemos tener en cuenta es la alimentación. Comer de forma frecuente alimentos calificados como comida basura o rápida puede ocasionar la aparición de este tipo de granitos que se convertirán en una molestia conforme vaya pasando el tiempo. A esto, debemos sumarle también otros hábitos poco saludables.
El consumo de alcohol o de tabaco, por ejemplo, pueden contribuir de gran manera a que nuestra piel guarde ese exceso de grasa y nuestros poros se terminen obstruyendo. Todo ello hace que nuestra salud se vea perjudicada, además de alterar la naturaleza de nuestra piel. Si empezamos a cambiar estas conductas, terminar con el problema será mucho más sencillo que si no las conocemos o no actuamos como se requiere.