Del presidente de Pepsi al apoderado de Ausonia: así es la directiva de Ecoembes

Ecoembes es una sociedad anónima sin ánimo de lucro formada por las grandes empresas generadoras de envases. Muchos colectivos ecologistas se preguntan por qué en España el monopolio del reciclaje recae sobre Ecoembes cuando los datos de envases reciclados del país son tan lamentables (solo se recuperan el 30% del total de los residuos plásticos, según Greenpeace). Pues bien, resulta que quienes se encargan de dirigir a este conglomerado de empresas son Xavier Orriols Arumi, expresidente de Pepsico en España (en calidad de presidente) y Javier Solans Senen (en calidad de vicepresidente), apoderado de Ausonia y administrador de otras empresas relacionadas con detergentes o productos de limpieza. Todo empresas que tienen un denominador común: generan plásticos para dar y regalar.

Es curioso, cuanto menos, que, según detallan colectivos ecologistas consultados por este medio, Ecoembes lo dirijan directamente empresarios del mundo del plástico. Ser presidente de Pepsico, una empresa de bebidas carbonatadas cuyo producto más conocido es Pepsi, la competidora de Coca-Cola, durante varios años te acredita para gestionar el reciclaje de toda España en forma de monopolio, o al menos es lo que se desprende de la decisión tomada en junio de 2020 por la sociedad anónima sin ánimo de lucro tras decidir que Orriols era la persona adecuada para presidir Ecoembes. El resultado de este tipo de decisiones es que, según Greenpeace, en España no se llega al 30% de envases de plástico recuperados, por no hablar de que hay informes internacionales, como el de Changing Markets, que señalan que en España hay un problema importante en relación con el reciclaje.

Pero Orriols no es el único gestor del monopolio con poca o nula experiencia en relación con el reciclaje y la economía circular. El vicepresidente de Ecoembes, Javier Solans Senen, tiene una larga relación laboral con los productos de limpieza y la higiene. Ha sido apoderado y administrador de empresas como Ausonia, Arbora, Arborinvest, Bluesun Consumer Brands o Coty Beauty Spain, un currículum muy apto para gestionar en calidad de vicepresidente el reciclaje en este país. Vuelta a los datos de envases recuperados, deja mucho que desear esta directiva, tal y como detallan desde Greenpeace.

El otro vicepresidente de Ecoembes es Jaime Rodríguez Bertiz, cuyo paso por las empresas se ha centrado directamente en el desarrollo de marca, no tanto en el reciclaje, donde ha tenido una pasada testimonial en su preparación laboral. Rodríguez Bertiz ha sido prácticamente de todo en Desarrollo de Marcas S.A., algo que puede dar explicación a la impactante y efectiva campaña de publicidad de Ecoembes que ha bañado de verde la televisión y los medios de comunicación por sus inversiones en publicidad.

Todos los nombres de la directiva, en resumen, están relacionados con las grandes empresas. No es raro, dado que Ecoembes no deja de ser una entidad nacida fruto de la normativa que obligó a las grandes empresas a hacerse cargo de los residuos plásticos que generaban. El secretario de Ecoembes también tiene su intensa relación con empresas generadoras de plástico. Ignacio Larracoechea Jausoro ha estado relacionado con Promarca, también márketing de venta de un producto pero nada que ver con la economía circular. Nadie en la directiva está relacionado con el reciclaje ni tiene experiencia relacionada con la recuperación de envases o la reutilización de plásticos.

Si se sigue hurgando, se puede hacer eterno. Hay consejeros relacionados con Pescanova, con Danone, con Dodot, con Refrescos Envasados S.A., con Cicloplast, con Alcampo y con más empresas que nunca han realizado un alegato en favor de reducir la cantidad de plásticos que se generan. Desde el presidente hasta los consejeros, Ecoembes solo dispone de grandes empresarios relacionados con la emisión de envases y muchos miembros expertos en márketing y en venta de marcas.

ASÍ RECICLA ECOEMBES

Son muchos los grupos ecologistas que se han propuesto tumbar el monopolio de Ecoembes. Un informe de Greenpeace asegura que en España solo se recuperan el 30% de los envases. La economía circular en nuestro país tiene mucho trabajo por delante y, aún así, el Ministerio de Transición Ecológica no da paso a nuevos sistemas de reciclaje, como el de devolución, depósito y retorno (SDDR) que ya funciona en muchos países de la UE. Al mismo tiempo, el Gobierno consiente que Ecoembes tenga acceso a ayudas europeas y estatales para financiar nuevos sistemas de reciclaje que ayuden a subir ese lamentable porcentaje que arroja Greenpeace.

El presidente de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, acaba de aprobar una ley por la cual se permitirá a Ecoembes aplicar nuevos sistemas de reciclaje en la región pagados con dinero público. El problema de esto, según los expertos medioambientales consultados por MONCLOA.com, es que Ecoembes tiene la “obligación” de reciclar el 100% de los residuos plásticos que genera, una cifra que no cumple. Además, con esta permisividad de los gobiernos autonómicos, Ecoembes podrá mantener el control férreo sobre el reciclaje.

LA «COMPENSACIÓN DE ECOEMBES

Ecoembes tiene un curioso criterio para “compensar” a quienes realmente gestionan los residuos reciclables en España. En el caso de los contenedores de papel y cartón (el azul de toda la vida), esta sociedad anónima sin ánimo de lucro se basa en un informe para pagar como compensación tan solo el 40% (como máximo) del peso del contenedor. Lo divertido de esta situación es que esos estudios apoyan directamente la conveniente teoría de que en un contenedor azul tan solo es reciclable, como máximo, el 40% del total. El 60% restante (en el mejor de los casos) está compuesto, bajo su punto de vista, de revistas u otros residuos que no son reutilizables. Por este motivo, Ecoembes no paga por ellos. Quien sí lo hace son los propios españoles con sus impuestos, que se tienen que hacer cargo de la gestión de los residuos sobrantes de este contenedor.