Los aplausos colectivos desde los balcones y los portales se han sucedido en la tarde de este lunes 8 de marzo para reivindicar los derechos de las mujeres y como respuesta a la prohibición de manifestaciones en Madrid por el coronavirus. Las ovaciones se han replicado en distintas zonas de la capital, como Aluche, el Barrio del Pilar o Lavapiés, aunque el seguimiento ha sido desigual.
A lo largo del día, diferentes grupos feministas han hecho un llamamiento por redes sociales a las mujeres para que salieran al exterior a las 20.00 horas a lanzar «aplausos feministas» para protestar por las desigualdades y recordar a las mujeres que más han sufrido las consecuencias de la pandemia.
Asimismo, bajo las etiquetas #SalAlBalconMadrid y #SalAlPortalMadrid y #AplausoFeminista, la coportavoz de Podemos, Isa Serra, ha recordado a «las mujeres que se han dejado la piel en esta pandemia» y ha invitado a todas a «unirse» a este aplauso.
También desde la cuenta de Twitter del Palacio de la Moncloa, así como desde la de otros ministerios, animaban a seguir reivindicando «la igualdad plena desde los balcones, portales, centros de trabajo» con un «aplauso feminista» a las 20.00 horas. Contra la violencia machista, por el mismo salario a igual trabajo y por más corresponsabilidad familiar», ha publicado el Ejecutivo en un mensaje, al que se han sumado las Delegaciones de Gobierno de distintas comunidades autónomas.
Con estas aclamaciones, las feministas han respondido a la suspensión de la Delegación del Gobierno en Madrid a la autorización de concentraciones por el Día Internacional de la Mujer argumentando razones de salud pública. El Pleno del Tribunal Constitucional rechazó este lunes por unanimidad suspender la prohibición de celebrar manifestaciones por el 8 de marzo, aunque admite a trámite los recursos de amparo presentados por los sindicatos UGT y CCOO.
Los aplausos colectivos desde los balcones al personal de servicios esenciales se hicieron populares por todo el territorio nacional después de que surgiera esta iniciativa en redes sociales cuando el Gobierno decretó el estado de alarma en marzo ante la propagación del coronavirus.
Fue con el confinamiento y las restricciones de movilidad de la primera ola cuando los aplausos colectivos y la música desde casa tuvieron su mayor apogeo. Los momentos más duros de la crisis sanitaria, que coincidieron con el famoso ‘pico’ de la epidemia, se saldó con el agradecimiento mayoritario de los ciudadanos al personal sanitario y a los centros hospitalarios, muchos de ellos al borde del colapso ante el alto número de contagiados y fallecidos.