España es un país con una gastronomía muy rica. Tenemos recetas y cocineros de vanguardia que son venerados incluso fuera de nuestras fronteras, pero también tenemos recetas tradicionales que llevan siglos deleitando nuestros paladares. Muchas de estas recetas son platos de aprovechamiento, con un origen humilde, que hoy en cambio están presentes en las mesas de cualquier casa. Este es el caso por ejemplo de las migas, cuyo ingrediente, el pan duro, nos da un plato rico y contundente que gusta a todo el que lo prueba. ¿Te animas a intentarlo? Te damos los trucos para prepararlas y que te queden estupendas.
5Trucos
Hay algunas claves para que las migas sean jugosas y no se queden secas. Por una parte, es fundamental que el pan sea duro, no tierno, y que esté bien desmigado cuando lo ponemos en la sartén, para que no se formen bolas de pan y además absorban bien el sabor del resto de los ingredientes. Pero también es fundamental que no se queden secas. Para ello, ya hemos dicho que hay que humedecer el pan antes de cocinarlo. Si de todas formas al añadirlo a la cocción seguimos viendo que el pan está seco, podemos seguir «regándolo» con agua – de forma muy sutil, con la mano – en la sartén.
