Pedro Sánchez muestra su peor cara: de vacaciones pese a Afganistán

Ni los altos precios de la luz, ni el horror Talibán en Afganistán ni en la repatriación del personal español ni los afganos que han ayudado a las tropas españolas desplegadas en el país. Nada ni nadie perturba las vacaciones de Pedro Sánchez. Es más, el presidente del Gobierno ha decidido prolongar su estancia en Lanzarote para evitar responder públicamente sobre la crisis energética y el golpe de Estado de los Talibán en Afganistán.

‘Su persona’ estará más días de los previstos debido a la improvisación, práctica muy habitual en este Gobierno y en plena tormenta de críticas por no haber actuado con contundencia a la hora de repatriar a los españoles. Tal es el desorden y desconcierto del Ejecutivo que hasta el ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha asegurado que el aeropuerto de Kabul es un sitio «seguro», pese a los tiroteos, avalanchas y la continúa presencia de los helicópteros del ejército norteamericano para evitar que los talibanes se hagan con el control de la única infraestructura que les queda por tomar.

Pero Pedro Sánchez está a otras cosas en agosto. Dentro del palacio real de La Mareta no suenan los ecos de Afganistán ni de las críticas de la oposición. Tampoco las voces de los principales líderes europeos, que sí han decidido cortar sus días de asueto para al menos dar un mensaje de tranquilidad y las oportunas explicaciones a sus conciudadanos.

pedro sánchez

Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Alemania, Italia e incluso República Checa han sacado a todo o gran parte de su personal destinado en el país. En España, el Boletín Oficial del Estado llegaba a publicar una oferta de trabajo para la embajada española en Kabul.

PEDRO SÁNCHEZ, INCAPAZ DE CORTAR SUS VACACIONES, DELEGA EN ALBARES

Pese a que desde hace quince días los Talibán sembraron el caos en Afganistán, tomando el poder con las armas abandonadas por el propio ejército afgano, España no ha movido un dedo hasta última hora, más allá del descuento. Los aviones españoles no estaban aún listos cuando desde los Ministerios de Exteriores y Defensa anunciaron el inicio del plan. Pero para poder ejecutar, primero hay que planear. No había estrategia y sí improvisación a grandes dosis.

De hecho, el Gobierno ahora se comunica por teléfono con la oposición a través del Ministerio de Exteriores, con José Luis Albares al frente. Explicaciones muy poco convincentes y que a todos los partidos les ha parecido insuficientes. Tanto es así, que Exteriores ha evitado dar a conocer a cuántas personas se sacarán del infierno de Kabul. Estados Unidos pretende sacar a cerca de 30.000 personas, tras desalojar a todo su personal, mientras que Alemania disminuye la cifra a 10.000. En España se desconoce por completo. También si la plaza sacada por el BOE está ya adjudicada para enviar al operario a una embajada en manos de los talibanes.

Se dejará a personas atrás pese a haber trabajado como traductores

Por ahora, el planteamiento del Gobierno de Pedro Sánchez en Afganistán se centra en rescatar a los españoles. No habrá plazas para la totalidad de los afganos y sus familiares, más de 800 personas, que ayudaron a las tropas españolas desde el despliegue en el país. Y es que, cada uno de los dos aviones A400 enviados por España a Kabul es capaz de transportar a unas 400 personas. En el primer vuelo que saldrá de Dubái van incluidos 50 militares para proteger la evacuación. No hay espacio para todos.

Se dejará a personas atrás pese a haber trabajado como traductores, guías o en logística para España. Con sus familiares podrían ser aún más. Su destino será una muerte si los Talibán les cogen en esta huida. De hecho, Francia se ha opuesto a traer refugiados afganos a Europa. «Europa por sí sola no puede asumir las consecuencias de la situación actual«, ha afirmado Enmanuel Macron, presidente de Francia.

PEDRO SÁNCHEZ, APEGADO A LA MARETA Y PRESO DE LA IMPROVISACIÓN

Pero Pedro Sánchez prefiere mantener la estrategia del avestruz. Agazaparse hasta que amaine la tormenta. Su látigo para la purga no es eficaz para tapar la crisis en la evacuación de españoles, tampoco pinta ya nada en España. Su falta de liderazgo es manifiesta pese al cargo que ostenta. Ni una palabra pública, más allá de un tuit sobre la situación de Afganistán y publicado a última hora de este lunes. Nada más. Una declaración que provoca el bochorno de la oposición.

Por contra, en Europa sí hay otras actitudes de liderazgo. Angela Merkel, canciller alemana, ha salido al paso de esta crisis y ha explicado con detalles su plan. Reino Unido, por su parte, ha convocado al Parlamento para dar las oportunas razones, mientras que Francia y República Checa se habían movido con anterioridad.

Una semana después, el único plan del Gobierno de Pedro Sánchez es la improvisación, con varias versiones. El primer plan para repatriar al personal desplegado en Afganistán se centraba en el envío de tres aviones, uno de ellos comercial. Sin embargo, las aerolíneas subieron los precios a 2.500 dólares por pasajero, para horas después cancelar todas las operaciones en el país.

El asedio Talibán ha sido más rápido de lo estimado en un primer momento debido principalmente a que no han encontrado oposición. De hecho, se han dedicado a masacrar, torturar y aplicar inmediatamente la sharia, con la obligación del burka para todas las mujeres, incluidas las occidentales. No hacerlo equivale a la pena capital, que suele venir de un tiro en la nuca o bien latigazos.

LA MARETA, LUGAR DONDE A SÁNCHEZ LE LIMPIAN LA PISTA DOS VECES AL DÍA

La situación política ha hecho extraños compañeros en la oposición. Pablo Casado, el líder del PP, y Ciudadanos, junto a otras formaciones, han pedido explicaciones a Pedro Sánchez. Éste, por el momento, se ha negado a darlas y prefiere mantenerse escondido en La Mareta, en la tumbona de la playa. Alejado del mundanal ruido del resto de la Cámara Baja.

Por primera vez JxCat y Vox han realizado casi el mismo discurso sobre el fracaso de la UE, Estados Unidos y la OTAN por abandonar a su suerte a miles de personas. Cabe recordar que los Talibán son unos 75.000 efectivos, frente a los 300.000 que llegaron a estar en el Ejército afgano.

Pedro Sánchez puede permanecer en el interior de su complejo de 30.000 metros cuadrados, los que tiene el palacio de La Mareta. Este edificio fue un regalo de Hussein de Jordania al Rey emérito Juan Carlos I. Tiene un acceso directo al mar, con piscina, terrazas, gimnasio, pista de tenis, baloncesto y jardines.

Con la transición en la Corona, Felipe VI entregó este palacio a Patrimonio Nacional. Desde entonces, es la casa de vacaciones de Pedro Sánchez, donde podrá encestar en sus ratos libres ya que la pista se encuentra en perfecto estado de conservación tras autorizarse una adjudicación de 90.000 euros para la limpieza de todo el complejo. En el contrato se detalla que la limpieza se debe realizar de forma diaria y dos veces.