Víctor Bellón, policía nacional que participó en las tareas de evacuación en Afganistán, ha calificado como el momento «más duro» ver a una madre tener que elegir «entre un niño y el otro», en referencia a uno de los hijos que se quedó con el padre en ese país.
Así lo ha relatado a los medios de comunicación coincidiendo con la recepción que le ha ofrecido la subdelegada del Gobierno en A Coruña, María Rivas, en un acto en el que ésta ha ensalzado la labor que realizan las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad en materia humanitaria.
Víctor Bellón, de Narón (A Coruña) y con 27 años de ejercicio profesional, de los que 23 ha sido en unidades de intervención, ha explicado que esta era su segunda misión en Kabul ya que estuvo con anterioridad en 2018.
«Nada que ver, en principio era todo normal hasta que empezaron a acercarse los talibanes y ya veíamos que no acabaríamos la misión», ha dicho comparando una situación con otra.
«Me traigo tanto experiencia profesional como humanitaria porque era más función humanitaria, un poco de todo, ayudando a la gente que llegaba en muy malas condiciones físicas y de drama familiar», ha recordado.
En particular, ha aludido a un niño «que lloraba por el hermano». «El hermano quedó con el padre, la madre tuvo que elegir entre salvar un niño o el otro, fue lo más duro», ha sentenciado.
Por otra parte, ha admitido que hubo momentos en los que temió por su vida, sobre todo en el atentado del último día antes de su partida. Aún así, ha manifestado que «vives como una burbuja y te dedicas a hacer lo que tienes que hacer».
