Moreno no permitirá un «paso atrás» en la autonomía fiscal de Andalucía

El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha querido dejar claro este miércoles, durante su discurso de arranque del Debate sobre el Estado de la Comunidad que se celebra ante el Pleno del Parlamento, que no va a permitir que haya «menoscabo» alguno a la autonomía fiscal de esta comunidad «ni un paso atrás» sobre lo conseguido en esta legislatura en materia de rebaja de impuestos. «Mientras yo sea presidente, los andaluces no volverán a sufrir un infierno fiscal», ha sentenciado.

Durante su intervención, Moreno ha puesto en valor la reforma fiscal acometida por su Gobierno, que ha supuesto que se hayan bajado impuestos a los andaluces en los años 2019, 2020 y 2021, lo que ha permitido aumentar el número de contribuyentes en 119.000 y recaudar solo por IRPF 600 millones más. En el ejercicio de 2022, según ha apuntado, también se producirá una nueva rebaja de impuestos que situará a Andalucía en el ‘Top 5’ de territorios fiscalmente más competitivos en España.

Así, ha expuesto que a la bonificación al 99% de las Sucesiones y Donaciones entre padres, hijos, cónyuges y abuelos que se aprobó nada más arrancar la legislatura, el próximo año se sumará «el mejor régimen entre todas las comunidades en favor de hermanos, tíos y sobrinos, que como máximo pagarán un 45% frente al 70% que podían alcanzar hasta ahora».

Asimismo, ha explicado que la Ley de Tributos Cedidos aprobada recientemente, beneficiará a todos los andaluces que tributan por IRPF, es decir, a todo el que tiene una nómina, a todos los autónomos y a todos los pensionistas. «Beneficia directamente a más de 4 millones de andaluces, que ya nos gustaría que fueran ricos, como dicen algunos», según ha dicho Moreno, apuntando que esta reforma beneficia principalmente a la clase media y trabajadora, «que se ahorrará y tendrá en sus bolsillos 329 millones de euros».

Ha querido dejar claro que su Gobierno baja impuestos «porque es bueno para los andaluces y porque bajar impuestos deja dinero en sus bolsillos, mejora los servicios públicos, favorece el acceso a la vivienda e impulsa el empleo»: «En definitiva, nos hace más competitivos y deja de ahuyentar la inversión hacia otros territorios fiscalmente más atractivos.

Por eso, según ha recalcado, «no podemos permitir que haya ningún menoscabo de nuestra autonomía fiscal para acabar subiendo de nuevo los impuestos a los andaluces». «No vamos a permitir ni un paso atrás sobre lo conseguido y mientras yo sea presidente, los andaluces no volverán a sufrir un infierno fiscal», ha señalado.