Delia Piccirilli, la eterna artista de cabecera del PP, «trinca» otro contrato gracias a Levy

Se llama Delia Piccirilli y es una vieja amiga del Ayuntamiento de Madrid. Ha tenido innumerables trabajos y contratos, pero prácticamente durante cerca de 20 años ha recibido grandes encargos del Consistorio acompañados de una buena subvención pública. Es polivalente, eso sin duda, pues la puedes ver en diferentes escenarios, pero es archiconocida en Madrid por ser ella la responsable de organizar las cabalgatas de Reyes desde que arrancó el siglo, aunque no ha sido constante todos los años. Ahora, la concejala de Cultura y Turismo, Andrea Levy, ha decidido honrar las tradiciones y ha contratado a Piccirilli como comisaria para ese festival que hace que a Iberdrola y Endesa se les iluminen los ojos (nunca mejor dicho): LuzMadrid, un evento que pretende iluminar los edificios por un coste público de unos 800.000 euros. Por supuesto, la afamada Piccirilli, salpicada por alguna que otra irregularidad en el pasado por la renovación de contratos públicos, se lleva su parte del pastel.

Piccirilli es la artista de cabecera del Partido Popular. Ha estado con los alcaldes de Madrid Alberto Ruiz Gallardón, con Ana Botella y ahora con José Luis Martínez Almeida. Pero ya hay quien empieza a oler a naftalina al sacar los contratos de Delia Piccirilli con el Ayuntamiento de Madrid. La sorpresa de algunos dirigentes populares ha sido que Delia ha vuelto a aparecer, pero esta vez no lo ha hecho solo para coordinar las cabalgatas de los Reyes Magos, sino que al parecer es la persona idónea para Levy para ser la comisaria del festival LuzMadrid, que se llevará 800.000 euros de todos los madrileños por iluminar con estilo algunos edificios de la capital. Poco se ha hablado de que el megavatio hora ronde los 200 euros, pero mucho dentro del PP de que Piccirilli siga siendo la artista de cabecera del Partido Popular de Madrid.

No solo incomoda que Delia Piccirilli sea otra vez la que se lleve el contrato público o sea quien coge un buen puesto en un evento como LuzMadrid, sino que pesa sobre algunos históricos del PP que esta artista, fundadora de la empresa Ciudadano Kien, ha estado salpicada de varios escándalos de los que los populares querrían desprenderse. Ya hubi quejas en 2004 por el hecho de que la Concejalía de Las Artes pagara a Piccirilli nada menos que 76.253 euros en pequeños contratos facturados ese año al mismo tiempo que ocupaba un alto cargo en la empresa municipal Madrid Arte y Cultura, como responsable de las fiestas populares de la ciudad. Estos pequeños contratos sumados a su dominio absoluto de la organización de la cabalgata de Reyes hizo que más de uno se llevara las manos a la cabeza y empujó a más de un popular a recurrir a la técnica del avestruz para evitar reproches. Pero esto no se quedó aquí, pues Piccirilli lleva tiempo cobrando buenas cantidades de dinero público a través de los contratos que licitaba el Ayuntamiento de Madrid.

También en 2015 saltaron nuevos pequeños escándalos que salpicaban a Piccirilli, la comisaria que Levy quiere para LuzMadrid. Con el relevo en el Área de Las Artes del Ayuntamiento de Madrid, lo que anteriormente fue la Concejalía de Cultura, se puso al descubierto que había seis contratos con gestores municipales que se renovaron de forma irregular, tal y como reconoció entonces sin rodeos el propio Ayuntamiento de la capital. Todo esto se hizo bajo el amparo de la polémica concejal independiente Alicia Moreno, quien dirigentes del PP recuerdan con cierta reticencia.

Con todo esto, ha generado ciertos recelos en el PP de Madrid y en el Ayuntamiento la decisión de Levy de colocar a la polémica Piccirilli como responsable del evento que hará que Iberdrola haga el agosto. Dar tantos galones a quien se ha llevado una buena cantidad de contratos públicos por parte del Ayuntamiento de Madrid no ha gustado a los suyos, pero a Andrea Levy poco le ha importado el pasado de Piccirilli o los recelos que suscita en su propia formación. El dinero que el Ayuntamiento pagará a Piccirelli no figura de forma clara en el Portal de Transparencia, pero sí que se dividirá la iluminación de los edificios en pequeños contratos que van desde los 18.500 euros a los 93.000. Todo este dinero se pagará a través de la empresa Madrid Destino, la cual depende directamente de la concejalía de Levy.

En total, el evento de LuzMadrid, una de las joyas de la corona de Levy, tendrá un coste para los madrileños de cerca del millón de euros. La idea de este evento es que los artistas expresen sus obras de arte mediante la luz y proyectándolas en los edificio de la capital. Sea como sea, lo que sí queda claro es que la responsable de coordinar, organizar y dirigir el evento es una vieja conocida del PP que nunca les ha fallado. Muchos de los años de gobierno del PP en la cabalgata de Reyes Magos ahí estaba, sin fallar, por compromiso.

LOS CONTRATOS DE CIUDADANO KIEN

Pero Delia no solo es una artista que organiza cabalgatas y festivales de la luz. Vale para todo y Andrea Levy lo sabe. Desde que José Luis Martínez Almeida llegó a Cibeles, Piccirilli no ha dejado de disfrutar de sus contratos públicos. No hablamos de las polémicas que los salpicaban en décadas anteriores, pero sí de que el Consistorio no ha tenido reparos en darle concesiones a su artista de cabecera, quien también es directora de la empresa Ciudadano Kien. Levy, eso sí, ha dado todas sus concesiones a Piccirilli a través de la empresa Madrid Destino, al igual que se ha hecho con el festival LuzMadrid que arranca este 29 de octubre.

Este mismo mes de octubre, Piccirilli ha recibido un contrato público valorado en 98.000 euros para el suministro de una pista de hielo en plaza exterior del Centro Cultural Matadero. Además de cabalgatas, Delia sabe sobre pistas de hielo. Pero el contrato más gordo es un histórico que los lectores no se imaginarán. Andrea Levy ha destinado a través de Madrid Destino nada menos que 192.390 euros para la contratación del servicio de Dirección Artística para la actividad cultural «Navidad 2021». Y sí, esta organización incluyen las famosas cabalgatas de Piccirilli que Madrid ha disfrutado desde que arrancó el siglo.