La presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, ha señalado este viernes sobre los militantes de la formación naranja que se han ido al PP en los últimos tiempos que «la indignidad no es perder un escaño, la indignidad es mantenerlo a cualquier precio», algo que serán ellos los que lo tendrán que explicar.
Inés Arrimadas se ha pronunciado de esta forma este viernes en Badajoz, donde ha ofrecido la conferencia ‘Una alternativa liberal para España’, en el marco de Los Desayunos de El Periódico Extremadura.
«Estoy convencida de que si yo quisiera estar haciendo lo mismo que alguno de mis compañeros podría estar haciéndolo, lo que pasa es que no hemos querido: «Pero no solo yo, tengo magníficos compañeros que seguro que serían la delicia de otros partidos», ha dicho.
En ese sentido, y a preguntas de los asistentes a este desayuno informativo, Arrimadas ha considerado que «si una persona hoy está en Ciudadanos criticando al PP, y mañana puede estar en el PP criticando en Ciudadanos, que lleve él la penitencia de eso», ha señalado Arrimadas, quien ha avanzado que ella «eso lo podría haber hecho», al igual que «cualquiera» de los miembros de la formación naranja.
Arrimadas ha considerado que cualquier militante de Ciudadanos se va mañana al PP y «nos reciben con los brazos abiertos, y nos ponemos a criticar a Ciudadanos y tenemos allí un carguito», tras lo que ha reafirmado que «a pesar de todo lo que está pasando, la inmensísima mayoría» de miembros de Ciudadanos que se quedan en el partido
En ese sentido, la dirigente de la formación naranja ha defendido que «la dignidad no es mantener un escaño, o la indignidad no es perder un escaño, la indignidad es mantenerlo a cualquier precio», tras lo que se ha mostrado «muy orgullosa» de dedicar un años de su vida al servicio público, ya que «no hay democracia sin política».
«Nunca haré ese discurso de que todos los políticos son iguales o todos los partidos son iguales, porque realmente no es así, pero lo que no voy a hacer es mantenerme en política haciendo cualquier cosa y diciendo cualquier cosa en cada momento», ha aseverado Arrimadas.
En ese sentido, ha asegurado que ella ha «sido siempre mucho más respetuosa con el PP, mucho más, que algunos de los que ahora están en el PP criticando a Ciudadanos», y que antes decían «barbaridades del PP, sin piedad, y ahora están encantado».
«Eran los más críticos con el PP, decían barbaridades, y ahora son super del PP y super de Casado, y critican a Ciudadanos: bueno, pues que los expliquen ellos», ha señalado Arrimadas, quien ha considerado que «la etiqueta de tránsfuga no se te borra, se te graba y es un tatuaje permanente que no se te quita nunca».
Por eso, Arrimadas ha señalado que en su condición de liberal, defiende que «cada uno haga lo que quiera», pero ha recordado que más del 95 por ciento de los integrantes de Ciudadanos «seguimos en Cs, creemos en Cs, y sabemos de la importancia de que España tenga un partido liberal en el centro».
Ante esta situación, la presidenta de Ciudadanos ha querido dejar claro que para ella «el PP no es un enemigo», sino que «el PP es un partido socio que respeto», pero ha señalado que «no me voy a dar un balconazo un día y de repente me convierto al PP y empiezo a criticar a Ciudadanos, eso quien lo haga, que lo explique», ha concluido.