La instalación de sillas salvaescaleras está permitiendo a muchas personas disfrutar de una mayor movilidad, así como la capacidad de subir y bajar de una planta a otra de su domicilio. Estas sillas son cada vez más demandadas, puesto que su instalación no resulta complicada y se puede disponer de ella en poco tiempo y de forma rápida y sencilla.
Pero ¿qué son las sillas salvaescaleras?
Las Sillas salvaescaleras son un equipo que hace posible que una persona con movilidad reducida o nula pueda desplazarse de forma sencilla entre las diferentes plantas de una vivienda. Se adaptan a escaleras de diferentes tipos y con estilos arquitectónicos variados.
Son sillas que se pueden instalar tanto en domicilios particulares con más de una planta o en lugares públicos donde hay que subir o bajar escaleras. El funcionamiento es muy sencillo y consta de un asiento donde deberá colocarse la persona con movilidad reducida y de un raíl por el que la silla se desplazará mecánicamente hacia arriba o hacia abajo, según las necesidades de cada momento.
Es una instalación similar a las Plataformas salvaescaleras, pero su resultado es más estético en los hogares. En cuanto al uso de las sillas salvaescaleras es muy sencillo para todo el mundo. Tan solo hay que sentarse, ajustarse el cinturón de seguridad para evitar caídas y presionar el botón que activa la subida o la bajada de la silla.
Principales características de las sillas salvaescaleras
Estas sillas se pueden instalar en escaleras de un tramo o de varios tramos y tanto en escaleras rectas como en escaleras curvas, así que con total seguridad puede ser instalada en las escaleras de tu domicilio familiar. Son dispositivos que se pueden instalar tanto en interiores como en exteriores, según las necesidades de cada familia.
Su fácil instalación permite a los clientes disfrutar de su silla salvaescaleras en poco tiempo y sin necesidad de obras. Esto reduce la necesidad de empleados y permite un ahorro en el precio final de la instalación. El usuario puede controlar en todo momento el equipo, aunque también puede accionarlo el cuidador o familiar si necesita ayuda.
No podemos olvidar que una de sus principales ventajas es que ocupan muy poco espacio y que no interfieren al resto de familiares a la hora de utilizar la escalera. Esto es posible gracias a que la silla salvaescaleras es plegable y no se queda ocupando espacio al comienzo o al final de la escalera.
Existen modelos con muchos acabados y accesorios opcionales que cada familia puede elegir. Lo que sí encontrarán siempre es un diseño y una estética muy cuidada que hace que encajen a la perfección en cualquier hogar sea cual sea su estilo decorativo.
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