A la hora de hablar de platos típicos y sabrosos de la gastronomía española no podemos dejar de hablar del cordero asado. Un buen asado de cordero es una auténtica delicia para el paladar, si bien es necesario tener en cuenta una serie de consejos para conseguir el mejor resultado de esta receta.
Cuando la carne queda jugosa y tierna, y la piel tostada y crujiente se consigue el mejor resultado, pudiendo así centrarse en degustar este plato que gusta a la gran mayoría de personas y que será una opción ideal para cualquier momento. Te contamos los trucos para asar un cordero en casa bien jugoso y crujiente.
7LA TEMPERATURA DEL HORNO PARA PREPARAR EL CORDERO

El cordero debe asarse con el horno a 180ºC de temperatura; y en el tramo final de la elaboración se debe elevar hasta los 200ºC para tostar la piel. De esta manera conseguiremos ese resultado crujiente.
Es muy importante precalentar de la forma correcta el horno. Para ello se encenderá a 180ºC al menos una hora antes de meter el cordero. Deberás dejarlo un buen rato a esta temperatura para que esta se reparta de manera homogénea.