Uno de los principales problemas del verano, tanto si te quedas en casa como si sales de vacaciones son los mosquitos. O más concretamente, sus molestas picaduras. Aunque la presencia de estos insectos no es tan incómoda como la de algunos de sus “hermanos mayores”, como las moscas o las avispas, sus ataques son un clásico de cada época estival.
Por suerte, pueden evitarse. Y existen algunos trucos que no requieren demasiado esfuerzo pero que resultan bastante eficaces en la mayoría de los casos. Con ellos ahorrarás muchos ratos de picores indeseados.