Buñuelos de calabacín: cómo preparar un aperitivo perfecto y original 

Los aperitivos son uno de los mayores placeres de la vida. Esos pequeños trozos de comida que nos hacen el día más ameno y están de rechupete. En la mayoría de eventos y reuniones familiares, siempre suele haber lo mismo. Patatas fritas, anchoas o bocadillos. Cositas ricas que nos encantan, pero ya han perdido por completo la originalidad y todos se esperan. A continuación, te proponemos la receta de buñuelos de calabacín. Un aperitivo original con el que tus invitados saldrán de la rutina y siempre querrán volver a tu casa, ese lugar donde son tratados como auténticos reyes.  

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Forma de freír los buñuelos de calabacín 

Por otro lado, si lo que quieres es freír los buñuelos, la metodología será diferente. Tendrás que poner los alimentos en un sartén con abundante aceite y dejar cucharadas de masa cuando el aceite ya esté muy caliente. No llenes demasiado la sartén de masa porque los buñuelos crecerán conforme se vayan cocinando y si hay muchos pueden pegarse. Si tienes una placa con 9 niveles, lo correcto sería poner el fuego a 7, un ejercicio similar al que debes hacer con otras cocinas. En el caso de que veas que se va dorando demasiado rápido, quedando crudos por dentro, baja la temperatura. ¿Cuándo los sacas del fuego? En el momento en que veas que se abren. Ahí es cuando tienes que retirarlos y ponerlos en un plato. Eso sí, siempre con papel de cocina para quitar la máxima cantidad posible de aceite.