El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, ha prometido que Galicia reaccionará «desde el punto de vista práctico» y desde el «legal» si finalmente se produce la «imposición» por parte del Gobierno central del nuevo impuesto a las grandes fortunas. Precisamente, el Ministerio de Hacienda confirmaba el miércoles que ya entraría en vigor en 2023.
Preguntado al respecto en la rueda de prensa posterior a la reunión semanal de su Ejecutivo, Rueda ha criticado que se vaya «conociendo por fascículos» la intención del Estado y que «ahora» se diga que este tributo ya tendrá impacto este año cuando «primero» se hablaba de 2024.
Por eso, el presidente de la Xunta ha apelado a «conocer exactamente» la propuesta «para determinar las actuaciones» que se harán desde Galicia, ya que «en principio parece claro que es una invasión, bastante difícil de discutir, en las capacidades fiscales que tienen las comunidades autónomas».
El nuevo impuesto sobre grandes fortunas gravará la riqueza neta superior a los tres millones euros, con tres tramos: 1,7% a patrimonios entre 3 y 5 millones; 2,1% a patrimonios de entre 5 y 10 millones, y un 3,5% a partir de 10 millones.
Con este nuevo impuesto, que permitirá deducir el 100% de lo pagado por el Impuesto de Patrimonio que gestionan las autonomías, el Gobierno espera recaudar 3.000 millones de euros en 2023 y 2024. No obstante, la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) estima que la recaudación será algo más baja, unos 1.270 millones en 2023 y 1.370 millones en 2024.
En cualquier caso, si esa aprobación se produce, Rueda ya ha advertido que la Xunta, que para el próximo año bonificará hasta el 50% del Impuesto de Patrimonio, reaccionará «desde el punto de vista práctico» y «legal».