Las cremas antiarrugas son las mejores amigas de las mujeres entradas en años. Una de las señales de que la juventud se está escapando es que empiezan a aparecer líneas de expresión y arrugas indeseables que desearíamos no ver nunca. A partir de los 40 años empieza a existir la preocupación de cómo echar atrás las ojeras, las bolsas y las arrugas. La zona de los ojos es una de las más delicadas. Se concentra la parte más fina, donde hay menos colágeno. Es más propensa a ponerse ocupa y dejar una sensación en los demás de que tenemos un rostro cansado.
1Las cremas antiarrugas consiguen hacernos olvidar del paso del tiempo
Además de cumplir su propósito, las cremas antiarrugas mantienen hidratada la piel y la nutren para que se muestre, en ningún momento, seca ni tirante. Cuando empezamos a preocuparnos por el estado de nuestra piel existen algunos conceptos que empiezan a resonar fuerte en nuestra cabeza como la vitamina C, los antioxidantes naturales, el ácido hialurónico, las ceramidas o los péptidos. Son necesarios para que piel se vea restaurada, hidratada, fortalecida y minimizar al máximo los signos marcados por la edad.