La exvicepresidenta del Gobierno Soraya Sáenz de Santamaría ha reaparecido cinco años después. Y lo ha hecho en la órbita del presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijoo, para sorpresa de todos. Fue Soraya Sáenz de Santamaría, según fuentes de Génova y del entorno de Feijoo, la que frenó el primer intento de desembarco del entonces presidente de la Xunta de Galicia en el PP. Lo hizo bajo la idea de que existían unos dosieres que sedujeron al gallego de no volver a Madrid. Pero ahora, la exvicepresidenta del Gobierno ha vuelto porque «le gusta este PP» y porque entiende que es un buen momento de formar parte de la élite. Feijoo, desde luego, parece que no es de los rencorosos, tal y como comentan fuentes del PP. Pero Soraya Sáenz de Santamaría ha vuelto para sorpresa de todos.
Ha estado cinco años desaparecida después de intentar convertirse ella en la candidata del PP a la presidencia del Gobierno. La lucha encarnizada entre Alberto Núñez Feijoo, el exministro de Exteriores José Manuel García Margallo y la propia exvicepresidenta del Gobierno acabó tan mal para el Partido Popular que Pablo Casado encontró un hueco para convertirse en el candidato para la sorpresa de todos. Sin embargo, de esa guerra intensa salió una realidad que sacudió el partido. Fue Soraya Sáenz de Santamaría la que entonces frenó de forma milagrosa los intentos de Feijoo por aterrizar en Madrid para convertirse en el sustituto de Mariano Rajoy. Ahora, sin embargo, eso es agua pasada y ambos han hecho un ejercicio de olvido que ha sorprendido mucho en Génova, a la par de haber sido aplaudido.
Ahora mismo, la exvicepresidenta del Gobierno Soraya Sáenz de Santamaría forma parte de ese grupo de asesores VIP que están ayudando a construir el perfil presidencial de Alberto Núñez Feijoo. La moderación marca el principio, pero lo cierto es que la presencia de Miguel Ángel Rodríguez ayuda a darle un toque de color al perfil del que aspira a convertirse en presidente del Gobierno. La nueva batería de entrevistas que está concediendo Feijoo ha sido muy aplaudida a nivel interno, pero la vuelta de Soraya ha sorprendido sobremanera a un PP que la daba por exiliada de Génova. Ahora mismo, no solo se ha reconciliado con la cúpula popular, sino que además se reúne de vez en cuando con el presidente del PP contra todo pronóstico.
Esta vuelta ha sorprendido especialmente porque a la exvicepresidenta del Gobierno Soraya Sáenz de Santamaría la culpan de haber sido ella quien sedujo a Alberto Núñez Feijoo para que no se presentara a las primarias porque era ella quien quería ganar todos los galones para ser la candidata del PP. Fuentes de Génova ponían en relieve los famosos «dosieres» que tanto circularon por la sede popular en el momento en el que Alberto Núñez Feijoo salió entre lloros por los medios de comunicación para anunciar que no vendría a Madrid porque tenía un compromiso previo adquirido, pero todos en el PP hicieron una lectura bien distinta. Ahora, que se vuelvan a llevar bien ha sido algo que ha revuelto las tripas del PP.
Es cierto que la presencia de la exvicepresidenta del Gobierno Soraya Sáenz de Santamaría ha tenido más que ver con la elaboración del programa a presentar por el PP que por un asesoramiento estrecho y personal a Alberto Núñez Feijoo (eso se lo dejan más a las «cenas» con Felipe González). Aún así, que haya vuelto ha llamado la atención de quienes también piensan que Feijoo ha lanzado este aproximamiento a la exvicepresidenta para limar asperezas y evitar que surjan sorpresas inesperadas en el futuro. Ahora mismo, Soraya Sáenz de Santamaría ha tenido algo que decir en el programa electoral del PP y ha vuelto a la primera línea.
