No son todos. De hecho, son una minoría. Pero lo cierto es que dentro del Partido Popular y de Vox ya hay movimiento para menear el fantasma del «pucherazo electoral» por diferentes razones. Hay que decir que la tónica general en los dos partidos es la de asumir el resultado, pero lo cierto es que hay unos pocos que ya se han puesto en contacto con sus fuentes en los medios más conservadores para agitar el fantasma del tongo electoral especialmente porque no les cuadra el resultado al comparar el Congreso con el Senado. Son diversas las explicaciones, pero sobretodo se inspiran en el hecho de no comprender que Pedro Sánchez ha acertado con el adelanto electoral, desde el punto de vista de sus intereses, claro.
Los hay que consideran que Vox tendría que ser la segunda fuera política (muy por encima del PSOE) y los hay que directamente están atónitos ante la idea de que el Partido Popular haya sacado mayoría absoluta en el Senado y se haya quedado corto en el Congreso para conseguir una investidura. Este es un fantasma que han azuzado incluso desde otros la posición de altos cargos que poco tienen que ver con la política. Pero lo cierto es que incluso desde Génova lo achacan al «mal perder» de algunos además de insistir en que si se hubiera obtenido un resultado similar pero beneficioso para la derecha, en la izquierda también estarían alimentando el monstruo del tongo electoral.
El fantasma que se extiende a medida que pasan los días después de las elecciones es el de que han manipulado los votos. Algunos directamente hacen referencia al software que ha hecho el recuento de los mismos. Y otros directamente se centran en decir que ha sido un pucherazo al que solo le faltó el apagón para dar la vuelta a la tortilla. Las voces más «conspiranoicas» tanto de Vox como del PP aseguran que no puede haber ciudadanos que hayan votado al PSOE en el Congreso y al PP en el Senado. Que esta disparidad de votos hacen pensar que ha habido cambios que no cuentan. Pero cualquier cosa vale con tal de invalidar el resultado electoral. También el PSOE, no hay que olvidar, ha denunciado que han encontrado papeletas del PP ya predeterminadas para entrar en las urnas. Es un arma de doble filo que empuñan prácticamente todos los partidos.
Sea como sea, lo cierto es que tanto en el PP como en Vox no quieren que estas voces discordantes cojan fuerza. Pero lo cierto es que el morbo de filtrarlo a medios de comunicación afines se está extendiendo lo suficiente. Ya ha habido varios avisos de pucherazo. Varios llamamientos a cuestionar el resultado de las elecciones y varios toques de atención en el partido para no agitar este fantasma que nunca va a ningún lado. Y eso sin contar que todavía puede haber alguna sorpresa con el voto que viene de otros países. También ha habido altos cargos de otros estamentos profesionales que han metido mano en este asunto y han agitado el fantasma del pucherazo incluso con Correos. Nadie se ha quedado atrás a la hora de denunciar que el resultado electoral tan perjudicial para la derecha y poco alentador para la izquierda no es el que debería haber sido.
A todo esto tenemos que sumarle que casi seguro que el país está enfilando una repetición electoral para invierno, por mucho que los ánimos en el PSOE estén por las nubes. De haberla, esta idea se enquistará, pero hay que decir que las fuentes consultadas tanto en el PP como en Vox por MONCLOA.com dejan claro que esto es una tendencia absolutamente minoritaria y que todos respetan el resultado electoral.