El Gobierno de Isabel Díaz Ayuso ha anunciado una demanda ante el Tribunal Supremo contra el nuevo Plan Hidrológico del Tajo. «Es un nuevo ataque de Sánchez contra Madrid, el más mezquino que hemos sufrido», comunicó la presidenta regional ante los medios de comunicación durante su desayuno con el Círculo de Navarra. Todo ello llega tras el veto injustificable a la inauguración del AVE desde Madrid a Asturias, una censura única que no había ocurrido hasta ahora, ni siquiera con la crispación generada por el PSOE de José Luis Rodríguez Zapatero contra el PP en 2004.
Para la Comunidad de Madrid, el nuevo Plan del Tajo, ideado por el PSOE de Pedro Sánchez, «cambia radicalmente las reglas y boicotea el sistema de abastecimiento de agua de Madrid, que es el mayor de España y uno de los mejores del mundo», según Isabel Díaz Ayuso.
Para el Gobierno regional, el último movimiento del Partido Socialista, «pone impedimentos a los trasvases necesarios para que llegue el agua a las casas de los madrileños, impide cumplir los requisitos de depuración y obstaculiza la planificación».
AYUSO ACUSA AL PSOE DE PRETENDER QUE MADRID «SE RINDA POR SED»
Según Ayuso, el nuevo Gobierno central del PSOE, tiene como objetivo que Madrid «se rinda por sed». Llegado a apropiarse de los recursos naturales que pertenecen a todos los españoles y para ello, «ha aprobado un real decreto que pone en riesgo el abastecimiento de agua de casi siete millones de madrileños».
Por otro lado, la presidenta madrileña apuntó que Sánchez «no puede soportar que Madrid haya dicho no a su autoritarismo» ni «condene cada atropello» y, por tanto, castiga a la capital abriendo una guerra por el agua con la implantación del nuevo Plan Hidrológico del Tajo.
«El nuevo plan cambia radicalmente las reglas… pretende que el agua de los madrileños dependa de unos permisos que ellos mismo autorizarían o denegarían mes a mes, arruinando cualquier capacidad de planificación», apuntó Díaz Ayuso. Y añadió que desde el Gobierno central han ido rechazando la «mayoría de las alegaciones» realizadas por el Canal de Isabel II.
Es por eso, que la presidenta del Ejecutivo regional ha anunciado que desde su equipo de Gobierno y en representación de todos los madrileños han presentado una demanda ante el Tribunal Supremo contra el nuevo Plan Hidrológico del Tajo. «Nos quieren dejar sin trenes, sin aviones de corta distancia, sin museos y sin instituciones. Nos quieren discriminar con la financiación, pero no hay nada peor que pretender racionar el agua a casi 7 millones de personas», señaló Díaz Ayuso.
EN QUÉ CONSISTE EL PLAN HIDROLÓGICO DEL TAJO QUE PRETENDE EL PSOE DE SÁNCHEZ
Durante el último año, el Gobierno de Sánchez ha rediseñado un nuevo Plan Hidrológico del Tajo, implementado a principios de 2023. Este plan establece cifras que implican una significativa reducción del suministro de agua a varias regiones, especialmente a la Comunidad de Madrid.
La presidenta madrileña apuntó que Sánchez «no puede soportar que Madrid haya dicho, no a su autoritarismo… No hay nada peor que pretender racionar el agua a casi 7 millones de personas»
Isabel Díaz Ayuso
En virtud del nuevo Plan Hidrológico del Tajo del Gobierno central, requiere de una autorización previa para la derivación del agua del río Alberche al embalse de Valmayor, imponiendo así restricciones particulares al suministro de agua en Madrid. Según explicó la presidenta Ayuso, esta situación es única, ya que «nunca, dentro de una misma concesión, se ha pedido una autorización previa». En el mes de mayo, la presidenta autonómica mencionó la posibilidad de impugnar judicialmente este plan, un plan que ha vuelto a recordar.
El suministro también se ve afectado en el Canal de Isabel II, que lamenta que el Plan perjudica sus intereses al mantener el principio de prioridad para el abastecimiento de agua a las poblaciones en todo momento. El Canal ya ha iniciado un proceso para licitar servicios legales con miras a impugnar el Real Decreto del Plan Hidrológico.
EL PLAN DEL PSOE, IMPULSADO POR LA TRANSICIÓN ECOLÓGICA, AFECTA DIRECTAMENTE A LA COMUNIDAD DE MADRID
El Plan Hidrológico del Tajo fue impulsado por el Ministerio de Transición Ecológica, liderado por la ministra Teresa Ribera, fija en el Gobierno de coalición socialista. Dicho plan fija un caudal ecológico mínimo para el río Tajo, justificando que se hace con el objetivo de combatir las consecuencias del «cambio climático», entre otros temas.
En la práctica, la implementación del plan propuesto por el PSOE implica una notable reducción en la cantidad de agua derivada del Tajo para su uso. Se establece un caudal de 7 metros cúbicos en Aranjuez hasta el año 2026, aumentando a 8 a partir de ese año y a 8,6 en 2027. Esta disminución significativa del volumen de agua trasvasada tiene un impacto directo en el suministro de la Comunidad de Madrid, que constituye el 83% de la población en la Demarcación del Tajo.
La medida planteada por el PSOE genera preocupaciones en relación con la disponibilidad y accesibilidad del recurso hídrico en una región densamente poblada como Madrid. Este cambio en la política hidrológica podría tener consecuencias significativas para la agricultura, la industria y el suministro de agua potable en la comunidad, lo que ha llevado a la presidenta Ayuso a expresar su firme compromiso en la defensa de los intereses de la región. La preocupación se centra en la necesidad de equilibrar las demandas urbanas con la sostenibilidad del uso del agua en la región, un desafío que se plantea en un contexto de crecimiento demográfico y condiciones climáticas cambiantes.
Ante esta situación, Ayuso comentó que la Comunidad de Madrid defenderá lo que le corresponde.«Desde el inicio de la legislatura hemos sido claros en la defensa del campo y de las personas que lo cultivan, quienes son de gran importancia para todos nosotros».
