Podemos se suma a la heroica para resistir la embestida de Yolanda Díaz

Podemos no da su brazo a torcer ni tampoco se amilana ante el ataque sin prisioneros de Yolanda Díaz y Sumar. Los ‘morados’ de Irene Montero e Ione Belarra han rechazado todas las acusaciones de transfuguismo tras su paso al Grupo Mixto, mientras han defendido los pactos al señalar que los diputados de la formación actúan como representantes dentro de los ‘fucsias’, con una Díaz incapaz de convocar unas primarias y aunar a todos los partidos dentro de una gran coalición de la izquierda.

Sumar está estudiando demandar a Podemos por haberse ido al Grupo Mixto en vez de dejar las actas. Por este motivo, Podemos ha rechazado que haya cometido un acto de transfuguismo, como afirma Sumar, una acusación que podría llegar a los tribunales, aunque se cree que será una demanda a la catalana, donde el escrito se queda en el anuncio. Los coportavoces del partido, Isa Serra y Pablo Fernández, pasan página con respecto a Sumar e iniciarán su andadura parlamentaria por separado.

EL ANTITRANSFUGUISMO, LA PIEDRA DE TOQUE

De hecho, tanto Serra como Fernández han convocado a los suyos para el próximo 16 de diciembre en el Palacio de la Prensa de Madrid, como si de un ‘Vistalegre V’ se tratara, para reivindicar su ruptura con Yolanda Díaz e iniciar su andadura en solitario.

Horas antes, el ‘milustro’ de Cultura y portavoz de Sumar, Ernest Urtasun, apuntó contra Podemos por un supuesto incumplimiento del pacto antitransfuguismo tras abandonar la disciplina de voto de los ‘fucsias’, quienes no conforman un partido político ni tampoco tienen una jefa elegida por primarias, a pesar de haberlo prometido.

La adenda tercera del pacto entre Podemos y Sumar se refiere únicamente a un diputado díscolo, no a un grupo político

«Lo que es evidente es que yo creo que el transfuguismo no puede en ningún caso en este país ser premiado, en el sentido de que el pacto antitransfugismo precisamente fue creado para evitar que nadie pudiera beneficiarse de una situación así», aseguró. «El espíritu y la letra de lo que establece el pacto contra el transfuguismo son claros», ahondó.

Urtasun se refería a la adenda tercera del pacto. Esta señala que se considerará tránsfuga al diputado por una candidatura promovida por una coalición «si abandona, se separa de la disciplina de voto o es expulsada del partido político coaligado que propuso su incorporación y registro de la misma». No obstante, los cinco diputados de Podemos forman parte íntegra de una parte de Sumar, pero nunca se han llegado a integrar en la misma.

SUMAR CAMBIA AHORA EL ARGUMENTO

Los ‘fucsias’ han cambiado el argumento en su ataque a Podemos. En un inicio, la amenaza se centró en los derechos electorales y las cuotas económicas firmadas, donde Podemos obtenía el 23% del total a pesar de aportar el 16% del total del grupo parlamentario.

Sumar se refiere al caso de Meri Pita, la exdiputada de Unidas Podemos que se marchó a mitad de legislatura al grupo mixto sin abandonar el acta. La dirección de Irene Montero y Pablo Iglesias tildaron de transfuguismo este movimiento al considerar que fue una decisión «individual» y contraviniendo a la dirección.

La secretaria general de Podemos, Ione Belarra (dcha), y la exministra de Igualdad, Irene Montero, hacen frente común contra Sumar y Yolanda Díaz
La secretaria general de Podemos, Ione Belarra (dcha), y la exministra de Igualdad, Irene Montero, hacen frente común contra Sumar y Yolanda Díaz

Podemos ha encontrado notables diferencias entre el caso de Pita y los cinco de ahora al señalar que no han sido decisiones individuales, sino de partido que han seguido todos y cada uno de estos diputados. En este sentido, señalan que el acuerdo indica que será «el sujeto político o el partido que les ha presentado aclarará por escrito quiénes han abandonado la formación, han sido expulsados o se han apartado de su disciplina, a efectos de su calificación». De hecho, el transfuguismo sería si alguno de los diputados ‘morados’ se hubiera mantenido en Sumar.

PODEMOS ESQUIVA LA LUCHA CONTRA SUMAR

La estrategia de Sumar y Yolanda Díaz pasa por airear todos los trapos sucios de Podemos de forma pública, a la luz de todo y todos, sin cortapisas. No obstante, los ‘morados‘ prosiguen, ahora sí, a la suya, esquivando los puñales lanzados por la espalda y de frente desde la bancada ‘fucsia’. Lejos de avivar la llama de la venganza y entrar en un combate cuerpo a cuerpo, Podemos sigue a rajatabla el axioma de la paz: dos no pelean si uno no quiere.

De hecho, la principal premisa ahora en los ‘morados’ es trabajar para dar solución a los problemas de los ciudadanos, con propuestas y la congelación de los contratos del alquiler para evitar un aumento mayor de precios.

Tras el fracaso de Yolanda Díaz de hundir a Podemos en esta legislatura, los de Belarra y Montero esperan ahora un lleno absoluto en el Palacio de la Prensa para mostrar músculo, como hicieron en la manifestación del pasado 25-N.

Fuentes de Sumar recalcan que ahora están evaluando la situación y decidirán en próximos días si dan el paso de llevarlo al pacto para que los partidos emitan una declaración, o si optan por pasar página y dejar de generar ruido tras la fractura con los morados.

PODEMOS QUITA HIERRO A SONADAS SALIDAS

Pero no todo es una lucha entre partidos. Las bajas en Podemos se cuentan como cuentas de un rosario, con bronca interna en Madrid y Galicia. Sumar se ha desmarcado por completo de estas salidas, algunas aireadas públicamente por los propios protagonistas, como muestra de su mala conexión con los ‘morados’.

Así, han salido Roberto Sotomayor del Ayuntamiento de Madrid por la «bunkerización» de la dirección de Podemos y por no consultar con las bases la marcha al grupo Mixto en el Congreso. El que fuera candidato ‘morado’ para liderar el Consistorio de Madrid sigue ahora los pasos del excoordinador autonómico Jesús Santos y de Jéssica Albiach, líder en el Parlament, al tener prohibida la doble militancia. También Jaume Asens ha abandonado la disciplina parlamentaria de los controlados por Montero y Belarra.

Fernández ha indicado que se trata de casos puntuales y concretos, mientras que muchas personas continúan participando en los debates. Entre ellos, ha citado a los más de 6.000 aportaciones planteadas por los inscritos y a los participantes en la consulta sobre su pertenencia a Sumar, con 33.000 personas, cuyo resultado desveló el periódico de Pablo Iglesias en exclusiva el mismo día de la primera sesión de investidura de Pedro Sánchez.