El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, compareció durante la tarde de este jueves ante los medios de comunicación para rechazar dimitir o convocar elecciones anticipadas tras el devastador informe de la UCO que describe una organización criminal en la cúpula del PSOE, con Santos Cerdán como «la persona encargada de gestionar los presuntos pagos».
Tras un atril con el lema «España responde» y las siglas de su partido como fondo, Sánchez, ha pedido «disculpas y perdón» a la ciudadanía por los indicios de corrupción, pero ha evitado asumir responsabilidades. Se escuda en que Cerdán le engaño -«El PSOE y yo como secretario general no debimos confiar en él»- y descarta un anticipo electoral pese a la difícil situación en la que queda el partido y el Gobierno: «Convocatoria electoral no va a haber hasta 2027». También descarta una crisis de Gobierno porque niega que «esté afectando al Gobierno. Una opinión que no todos en el partido y en el Ejecutivo comparten.
«Estamos aquí para defender un proyecto político y eso supera las siglas del Partido Socialista», ha afirmado el líder del PSOE, descartando por completo ningún tipo de consecuencia electoral a raíz del escándalo relacionado con Santos Cerdán.
