El miedo a la muerte es algo que acompaña al ser humano durante toda su existencia. Sin embargo, en muchas ocasiones ese sentimiento no tiene tanto que ver con lo que pueda pasarle a esa propia persona, sino que está orientado a que va ser de sus familiares si fallece o le ocurre cualquier circunstancia desgraciada. Es ahí donde entra en juego la figura del seguro de vida.
Y es que la mayor parte de la gente tiende a pensar que el seguro de vida es como una forma de dejar cubiertos económicamente a los seres queridos en caso de que haya un problema irreversible. En esencia se trata de eso, pero realmente hay mucho más detrás. Y es que este tipo de producto esconde varias coberturas que no tienen que ver solo con la muerte.
En este artículo vas a poder descubrir de forma clara y sencilla cuales son esas coberturas y por qué es importante conocerlas al contratar un seguro.
Cobertura principal: el fallecimiento
Conocida por todos. Si la persona asegurada tiene la póliza en vigencia cuando fallece, los designados como beneficiarios reciben una indemnización económica. Este dinero vale para diferentes cosas, como podrían ser:
- Ayudar a la familia a mantener el nivel de vida
- Pagar deudas pendientes
- Cubrir gastos inmediatos
- Garantizar que los seres queridos no se queden desprotegidos económicamente
Cobertura por invalidez o incapacidad
Es un terreno menos conocido, pero que tiene una gran importancia. Existen seguros de vida que llevan consigo la posibilidad de cobrar una indemnización si la persona asegurada sufre una invalidez total o permanente. Normalmente es para casos donde una enfermedad impide seguir desarrollando una actividad laboral. Los fondos se pueden destinar:
- Respaldo económico para adaptarse a la nueva vida
- Costear gastos médicos
- Asegurar un ingreso mensual
Cobertura por enfermedades graves
El número de compañías en la que puedes encontrar esta opción está en claro aumento. Básicamente, se centra en que, si el asegurado es diagnosticado con una enfermedad grave, del estilo cáncer o infarto, recibe una parte del capital asegurado. ¿Para qué sirven esos fondos?
- Costear tratamientos médicos que no cubre la seguridad social
- Acceder a especialistas de forma más rápida
- Abonar todo lo referente a gastos adicionales en el proceso
Coberturas adicionales y extras
Más allá de las coberturas principales, existen seguros de vida que ofrecen algunos extras que pueden marcar la diferencia. Es conveniente revisar si la compañía que piensas contratar los ofrece, ya que en muchas ocasiones estamos hablando de opciones sin coste adicional. Estos son algunos ejemplos
- Anticipo del capital para los gastos originados con el entierro
- Asesoramiento legal tras el fallecimiento del asegurado
- Orientación médica a través del teléfono disponible 24/7
- Posibilidad de doble o triple capital si el fallecimiento del asegurado se produce en un accidente
Preguntas que uno debe hacerse
Como resumen, es importante establecer las preguntas que es recomendable que cada potencial asegurado se haga a si mismo. Serán ideales para comparar opciones y pensar en las necesidades reales de la situación. Serían las siguientes:
- ¿Quiero proteger solo a mi familia en caso de fallecimiento?
- ¿Me interesa estar cubierto también si me quedo incapacitado?
- ¿Prefiero un seguro que incluya enfermedades graves?