La nueva colada que surgió tras la reapertura de un foco eruptivo en el extremo oriental del volcán de La Palma, que destruyó el cementerio de Las Manchas, el campo de placas solares y numerosas viviendas, finalmente se ha detenido y se ha unido a la colada número 11, según ha informado en rueda de prensa el director técnico del Pevolca, Miguel Ángel Morcuende.
El director técnico indicó que en estos momentos se está monitorizando la colada 7, ya que se está ensanchando gradualmente y podría cerrar el acceso al punto de observación situado en la montaña de La Laguna, que se usa como punto de despegue de la mayor parte de los drones que están trabajando tanto en termografía como en visualización de la emergencia.
Miguel Ángel Morcuende apuntó que hoy continúa la afección de la lava sobre zonas ya afectadas y en las últimas 24 horas se ha producido un desbordamiento al suroeste de la zona de colada 3, en la zona de Las Norias, aunque su movimiento actual es muy lento. Por otro lado, se confirma la apertura en el día de ayer de dos fisuras eruptivas con orientación Este-Oeste al sur del cono principal, pero ya están inactivas.
Morcuende añadió que debido a la aparición del foco eruptivo en el flanco oriental del cono en el día de ayer, la lava sigue alimentando las coladas 7, 4/5 y 1/9 y la superficie total ocupada por las coladas, incluyendo los deltas lávicos, ascendía ayer a 1.151 hectáreas. Asimismo, la superficie afectada de cultivos se sitúa en 341,51 hectáreas, de las que 212,07 son de plataneras, 60 de viñedos y 26,42 de aguacateros.
Por otro lado, hoy se han suspendido nuevamente las obras de la carretera de acceso a Puerto Naos debido a la concentración de gases. Además, se siguen intensificando las labores de limpieza de ceniza y las obras de drenaje en los distintos municipios y en las carreteras. Ayer también se produjo un corte de suministro eléctrico, que fue repuesto a las 15.27 horas en los centros de transformación de la zona de La Jurona y la urbanización Hoyo Verdugo.
La sismicidad, tanto a niveles intermedios como profundos, sigue a niveles bajos y la amplitud del tremor se sigue manteniendo en valores bajos. Por otro lado, la emisión de dióxido de azufre (SO2) asociado al penacho volcánico continúa su tendencia descendente, aunque los valores todavía son altos. También hay una estabilidad general de la deformación en todas las estaciones de la isla.
En lo que se refiere al número de albergados, hay 526 personas en centros hoteleros, trece más que ayer. Del total, 425 se hospedan en el hotel de Fuencaliente, 31 en Breña Baja y 70 en Los Llanos de Aridane. Además, hay 43 personas dependientes atendidas en centros sociosanitarios insulares.
Respecto a la meteorología, en altura hay viento del Este que hace que la disposición del penacho de cenizas y SO2 se disponga hacia el Sur-Suroeste, lo que favorece la operatividad del Aeropuerto de La Palma, que se encuentra operativo desde las 12.30 horas después de que se haya procedido a la limpieza de ceniza en la pista y en la plataforma.
Sin embargo, esta disposición del penacho está provocando muchos problemas en la zona sur de la emergencia en materia de gases, sobre todo por dióxido de azufre, lo que ha impedido en el día de hoy la entrada de personas hacia las zonas evacuadas y también la limpieza de cubiertas.
Como consecuencia de la entrada del alisio, en la zona de El Paso ha habido un aumento del viento y está provocando una remoción de cenizas, lo que da lugar a una subida de la concentración de partículas PM10. En relación a las precipitaciones, en las próximas 72 horas hay probabilidad de lluvias de carácter débil a moderado en el Norte y Este de la isla.
En relación a la calidad del aire, al igual que ayer, en todas las estaciones de la isla los datos son buenos a razonablemente buenos, tanto para partículas PM10 como para gases.
