España ha depositado este jueves el instrumento de ratificación del Protocolo de Enmienda del Convenio del Consejo de Europa para la Protección de las Personas con respecto al Tratamiento Automatizado de Datos de Carácter Personal, el cual tiene carácter vinculante y está llamado a convertirse en el estándar internacional en esta materia en la era digital.
La ratificación, que se ha producido en la sede del Consejo de Europa en Estrasburgo, coincide con el 40 aniversario de la adopción del Convenio, según ha resaltado el Ministerio de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación en un comunicado, destacando que completa el compromiso de España «con este sistema de protección y su modernización».
Además, con ello España sigue «desarrollando el marco convencional del Consejo de Europa de acuerdo con el compromiso con esta organización de referencia en materia de Derechos Humanos en nuestro continente», ha añadido el Ministerio.
Desde el departamento que dirige Arancha González Laya, se ha destacado que el convenio ratificado «es particularmente relevante, puesto que se trata de un instrumento multilateral de carácter vinculante en materia de protección de datos personales, y tiene vocación de convertirse en un estándar internacional en materia de privacidad en la era digital».
Además, en el contexto actual de la COVID-19, el Convenio «cobra si cabe mayor importancia, pues establece una serie de estándares y salvaguardias legales y técnicas que permiten mitigar los riesgos implícitos en la gestión de la pandemia», ha precisado.
Según ha explicado Exteriores, el Consejo de Europa promovió el Protocolo de Enmienda de 2018 considerando la creciente necesidad de garantizar la protección de las personas en cuanto al tratamiento de los datos de carácter personal, y de manera más general de la protección de los Derechos Humanos y libertades fundamentales.
«España ha tenido una activa participación en el desarrollo de este Protocolo», ha reivindicado el Ministerio, destacando que el mismo adapta el Convenio de 1981 a las nuevas realidades de un mundo cada vez más interconectado y refuerza su implementación, al tiempo que permite aumentar el grado de protección que ofrecía el Convenio respecto a los datos de carácter personal».
