MĆ©dicos Sin Fronteras (MSF) ha pedido a Regeneron, empresa desarrolladora del casirivimab y el imdevimab, que garantizar un precio asequible y un suministro adecuado de estos tratamiento para la Covid-19 en los paĆses de ingresos bajos y medios.
MSF afirma que la compaƱĆa farmacĆ©utica deberĆa renunciar a obtener y hacer cumplir las patentes, especialmente en los paĆses de ingresos bajos y medios. La organizaciĆ³n mĆ©dico humanitaria afirma que Regeneron deberĆa tambiĆ©n renunciar a cualquier derecho de propiedad intelectual asociado a estos medicamentos, y compartir su tecnologĆa y conocimientos tĆ©cnicos para acelerar la producciĆ³n.
El casirivimab y el imdevimab -asĆ como el tocilizumab y el sarilumab, otros dos tratamientos para la COVID-19 que han sido recomendados por la OrganizaciĆ³n Mundial de la Salud (OMS)- pertenecen a la clase de fĆ”rmacos denominados anticuerpos monoclonales (mAbs), que se comercializan desde hace dĆ©cadas para el tratamiento de muchas otras enfermedades, incluidos varios tipos de cĆ”nceres, teniendo que adaptarse cada mAb a una enfermedad especĆfica.
Ā«Es inaceptable que las personas que viven en paĆses de ingresos bajos y medios no puedan beneficiarse de estos nuevos tratamientos que reducen la tasa de mortalidad de la COVID-19, por el simple hecho de haya empresas farmacĆ©uticas que tienen un monopolio. No es razonable que se anteponga el deseo de obtener grandes beneficios que tienen estas empresas a la salud de millones de personasĀ», afirma Elin Hoffmann Dahl, especialista en enfermedades infecciosas de la CampaƱa de Acceso de MSF.
Ā«En muchos de los paĆses en los que trabaja MSF en AmĆ©rica Latina y Ćfrica, la escasa disponibilidad de camas hospitalarias, el insuficiente nĆŗmero de trabajadores sanitarios para hacer frente a la gran cantidad de pacientes y la falta de oxĆgeno mĆ©dico hacen que todo aquello que pueda evitar la hospitalizaciĆ³n de pacientes resulte de vital importancia: un tratamiento combinado antiviral como casirivimab/imdevimab podrĆa ser crucial para salvar muchas vidasĀ», afirma el que fuera coordinador de emergencias de MSF en Brasil, Joan Tubau.
Ā«Y, sin embargo, estamos viendo que los mismos Gobiernos que compraron y almacenaron vacunas de COVID-19 hacen compras anticipadas similares de tratamientos de COVID-19, sin dejar apenas suministro para el resto del mundo, a menos que Regeneron permita que otras empresas ayuden a aumentar el suministro mundial. El acceso a los nuevos tratamientos de COVID-19 debe estar garantizado para todo el mundo, especialmente en los lugares donde la cobertura vacunal es baja, ya que, en estos lugares, inevitablemente se seguirĆ”n produciendo nuevas olas epidĆ©micas. Es la Ćŗnica manera de evitar que se produzcan aĆŗn mĆ”s desigualdadesĀ», aƱade.