El Gobierno de Pedro Sánchez tira del relato independentista para arrogarse una «mayoría social» inexistente

El Gobierno de Pedro Sánchez utiliza el mantra más usado por el independentismo para tratar de convencer de lo imposible: «La mayoría social». El pretexto no es ni genuino ni nuevo, pero es un mantra muy utilizado por ERC, Junts e incluso el PSC para tratar de imponer sus propias tesis. El presidente del Gobierno lo usó como justificación para tratar de parar la denominada «maquinaria del fango» en su discurso para quedarse en La Moncloa.

También lo ha expresado en esos mismos términos Ernest Urtasun para vetar a la Tauromaquia, Patrimonio Nacional, de los premios anuales del Ministerio de Cultura. «Una gran mayoría social así lo pide», afirmó.

En plenas elecciones catalanas y con la incertidumbre de si el PSC podrá gobernar con los independentistas de Junts o ERC -o ambos al mismo tiempo-, Pedro Sánchez ha copado toda las portadas, sean por los exabruptos e insultos del ministro de Transporte, Óscar Puente, al presidente de Argentina, Javier Milei, o por los descalificativos que está acostumbrando a decir Sánchez sobre Alberto Núñez Feijóo y Santiago Abascal, líderes de PP y Vox, así como los continuos ataques a la prensa. Para el Ejecutivo todo forma parte de la «maquinaria del fango» y como tal se les señala en todos los mítines realizados en Cataluña.

RTVE NO DA OPCIÓN A FEIJÓO

La crispación crece por momentos y en el ecuador de la campaña catalana será una parte clave para tratar de captar votos de los moderados de PP y Vox para el PSC, si es que cala el discurso de Sánchez, así como de Junts y ERC, con quienes gobernaría el candidato socialista Salvador Illa.

Mientras Pedro Sánchez copa titulares, RTVE aún no ha dado oportunidad alguna a ninguno de los partidos de la oposición, PP y Vox, pese a las continuas alusiones vertidas en la última semana, pero los líderes de ambas formaciones sí han respondido en sus respectivos mítines de campaña electoral.

Para Sánchez valía la pena seguir, pero se ha tensionado aún más esa crispación, generando una profunda brecha con los problemas reales de los catalanes y del resto de España con respecto a las principales preocupaciones de la política, más preocupada en su guerra entre partidos, olvidándose de que son servidores públicos y que gobiernan para todos, no sólo para una parte, aunque un escaño separe a ambos bloques.

PP Y VOX, CON 11,6 MILLONES DE VOTANTES

Pero para Pedro Sánchez, existe una «mayoría social» que le respalda en esta cruzada contra la denominada «maquinaria del fango», un término grueso que menosprecia a los más de 11,6 millones de votantes de PP y Vox -ocho y tres millones, respectivamente-.

Mientras tanto, Feijóo prefiere hacer campaña con un perfil moderado y tranquilo, sin cometer errores ni tampoco dar a conocer reuniones sorpresa de última hora, como sí hizo su antecesor en el cargo en 2021. El líder del PP no solo arropa al jefe y candidato del PPC en Cataluña, Alejandro Fernández, sino también ha aprovechado para presentar oficialmente a Dolors Montserrat como cabeza de lista para las europeas, una asignación más que esperada tras la decisión de mantener a Fernández al frente del partido en Cataluña.

Pedro Sánchez se mantiene en La Moncloa
Pedro Sánchez se mantiene en La Moncloa

En plena guerra abierta entre el PSOE y el PP, que ha optado por no permanecer callado ante la ofensiva socialista, el Gobierno de Pedro Sánchez insiste en dar por bueno el relato independentista. Y es que, bajo esa «mayoría social» se esconde un discurso más peligroso del que pudiera imaginarse.

El separatismo y el PSC lo utilizaron para tratar de imponer su nuevo Estatuto de Autonomía, cercenado por el Tribunal Constitucional, y que quiere ahora resucitar el PSC de Salvador Illa.

DESMONTANDO EL RELATO DE SÁNCHEZ Y SU MOVILIZACIÓN

Con esa «mayoría social» se montaron los referéndums ilegales, saltándose toda ley y la Constitución, como se hizo el 9 de noviembre y el 1-O, y con esa «mayoría social» el PSOE tratará de armar sus nuevas leyes, especialmente las que apuntan a la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), con un ultimátum de Félix Bolaños, el ‘superministro’, asegurando al PP que es «su última oportunidad». Además, está aún por ver cómo se vehiculará el freno a la denominada «maquinaria del fango».

Sánchez aseguró que la «movilización social» influyó «decisivamente en mi reflexión y que vuelvo a agradecer, quiero compartir con todos ustedes lo que finalmente he decidido». En qué consiste esa movilización. Según las cifras de la Delegación del Gobierno, en exactamente 12.500 personas.

Es decir, menos de las 50.000 firmas necesarias para proponer una ley autonómica desde la ciudadanía y menos de las 500.000 para llevarlas al Congreso de los Diputados. Pero con este relato juega el PSOE de Pedro Sánchez. Cabe señalar que con la amnistía se movilizaron, según el Gobierno, cerca de 45.000 personas, pero esta cifra no forma parte de la mayoría social, sino de la maquinaria del fango.

URTASUN Y SU MAYORÍA SOCIAL CONTRA LA TAUROMAQUIA

Con casi las mismas palabras y en la misma dirección se pronunció Ernest Urtasun. «La mayoría social está contra el maltrato animal», aseguró el ministro de Cultura para suprimir los Premios de Tauromaquia, pese a ser Patrimonio Nacional, como el flamenco. ¿En qué consiste esta mayoría social? Urtasun no ha desvelado datos ni cifras, pero bien lo conoce cuando en Cataluña se prohibieron los toros, mientras se mantienen los ‘correbous’, que no son más que encierros por las calles de los pueblos, eso sí, con un límite muy acotado para evitar sustos en las viviendas.

Pedro Sánchez se mantiene en La Moncloa
Pedro Sánchez se mantiene en La Moncloa

De hecho, si sumara al PSOE en esa «mayoría social», en Aragón, Castilla y León, Andalucía, Extremadura y Castilla-La Mancha tendrían serios problemas a la hora de pronunciarse, no solo por las corridas de toros, sino por toda la tradición que tiene el toro bravo en estas Comunidades Autónomas. El primero en pronunciarse es Emiliano García-Page, quien se ha ofrecido para acoger dichos premios, como también Aragón y como no podía ser de otra manera Isabel Díaz Ayuso en Madrid. Y es que, una cosa es gobernar y otra bien distinta meter la ideología en base a mayorías sociales inexistentes.