La pugna entre Iglesias y Teresa Rodríguez deja sin ministerios a la facción andaluza

  • Iglesias ha penalizado a los andaluces por su actitud crítica durante las negociaciones con el PSOE.
  • Fuentes del partido aseguran que los Anticapitalistas andaluces tampoco querrían un asiento en el Consejo de Ministros.
  • Los Anticapitalistas ya firmaron que irían por libre en las próximas elecciones autonómicas.
  • Unidas Podemos ha mantenido un perfil muy bajo desde que llegaron a un preacuerdo con el PSOE. Entre bambalinas, los dos partidos se reparten los ministerios que a día de hoy dependen de ERC. Unas carteras a las que no aspira ningún miembro de Podemos en Andalucía. La actitud crítica de Adelante Andalucía hacia las negociaciones entre Pablo Iglesias y Pedro Sánchez le ha costado a los de Teresa Rodríguez estar fuera del reparto de sillones. Algo que ahonda en el cisma entre la formación morada y su facción en Andalucía y que empuja más a los de Rodríguez a salir del partido en las próximas elecciones autonómicas.

    Iglesias no ha tenido en cuenta en ningún momento a los líderes de Adelante Andalucía para entrar en el Gobierno. Es su núcleo duro el único que aspira a sentarse en el Consejo de Ministros. Empezando por su pareja, Irene Montero, y acabando por la dirigente de Izquierda Unida Galicia, Yolanda Díaz. Ni Teresa Rodríguez, ni José María González (Kichi) ni otros dentro de la formación en Andalucía han siquiera estado en el bombo de reparto.

    Teresa Rodríguez fue muy crítica con que su partido se planteara formar un Gobierno de coalición con los socialistas. Desde abril, la dirigente de Adelante Andalucía dejó claro que la facción que lidera, la de los Anticapitalistas, estaba completamente en contra de entrar en un Ejecutivo con el PSOE. Para los andaluces, esto sería una derrota que ataría de pies y manos las reivindicaciones que siempre han lanzado desde Podemos.

    Todo se tornó más complicado cuando se filtró un documento que adelantó el diario El Mundo en el que Adelante Andalucía dejaba claro que tenía intención de presentarse a las próximas elecciones autonómicas por libre. Lejos de Podemos. Aunque quienes se presentarían serían también la suma entre Podemos e Izquierda Unida. Esto ahondó el cisma de Unidas Podemos y puso a los Anticapitalistas andaluces en la rampa de salida.

    Lo curioso es que, tanto en los comicios generales como en los autonómicos y municipales, Unidas Podemos solo obtuvo buenos resultados en Andalucía. La formación ha estado de capa caída desde hace años. Pero su baluarte ha sido el sur de la península. Liderado por los mismos que ahora quieren ir por libre y por los mismos que Iglesias no integrará en el Gobierno por haber sido críticos con sus negociaciones.

    El líder de la formación morada quiere tener atada y controlada su parte en el Ejecutivo. Quiere que quienes estén en puestos de responsabilidad respondan ante él sin actitudes críticas. Unas actitudes que Iglesias se ha esforzado estos últimos tres años en erradicar dentro de su partido. Empezando por el líder de Más País, Íñigo Errejón, y pasando por otros como Tania Sánchez u otros que acabaron en el «exilio político» tras las purgas que lanzó el secretario general de Podemos en Vistalegre.

    A Iglesias solo le queda esperar el apoyo de ERC, el PNV y otras formaciones nacionalistas, pues sus ministros los tiene claros. Y pese a que aún no se conozcan los nombres concretos, sí se intuye en el ambiente del partido que Yolanda Díaz e Irene Montero ocuparán puestos de relevancia en el Ejecutivo. Pero no tanto como él, que será vicepresidente del Gobierno.

    Los vaticinios de Rodríguez, sin embargo, parece que se harán realidad, ya que el PSOE ha presionado a su socio del potencial nuevo Gobierno para que renuncien a las medidas más radicales y rupturistas que llevan en su programa. Es por esto que Iglesias solo podrá llevar adelante propuestas como la subida del salario mínimo interprofesional a 1.200 euros, pero de forma progresiva. Todo lo demás se quedará en el tintero. Razón por la que los Anticapitalistas consideraban que una coalición ataría a Podemos de pies y manos.

    LA PERSPECTIVA DE LOS ERE

    No hay ningún nombre procedente de Podemos en Andalucía (o Izquierda Unida) sobre la mesa para heredar una cartera ministerial. Lo que aseguran fuentes del partido es que ni siquiera los andaluces querrían entrar en el Ejecutivo, ya que se mantienen en su posición de no querer gobernar junto a los socialistas. Quizá muy imbuidos e influenciados porque la realidad del PSOE de Andalucía es relativamente diferente a la del resto del partido a nivel nacional.

    Un ejemplo claro de la doble línea que ha mantenido Unidas Podemos en referencia a algunos temas es el caso de los ERE. Tras las condenas que confirmaban que el PSOE autonómico había cometido varios delitos en Andalucía, Iglesias guardó un silencio incómodo que fue cubierto con las críticas de los Anticapitalistas andaluces. Mientras Rodríguez o Kichi reclamaban a los exdirigentes socialistas Manuel Chaves y José Antonio Griñán que devolvieran lo robado, Iglesias aseguraba que se trataba de un acontecimiento del pasado.