miércoles, 11 diciembre 2024

La Policía Francesa detiene en Hendaya el exjefe de ETA David Pla

La Policía francesa ha detenido este jueves a David Pla, el último jefe de la extinta banda terrorista ETA. El arresto tuvo lugar este jueves en Hendaya, en la frontera de España con Francia.

Sobre el exdirigente de la organización criminal recaía una Orden Europea de Detención y Entrega desde el año 2011. Será entregado, por lo tanto, a España, después de que la Justicia francesa aceptase en diciembre de 2019 la solicitud de la Euroorden. Las autoridades españolas solicitaron su entrega para que sea juzgado por una cita clandestina que tuvo lugar en Landas en 2008, en relación con el aparato de presos de ETA, Halboka.

DETENCIÓN EN HENDAYA

La detención de Pla ha tenido lugar cuando éste se dirigió a firmar a una comisaría de Hendaya. Estaba obligado a ello después de ser puesto en libertad condicional en el pasado mes de abril de 2019. Estaba en esta condición tras cumplir cuatro de los cinco años de prisión que le fueron impuestos en Francia por pertenencia a organización terrorista.

La Euroorden que recae sobre el etarra la emitió el por el entonces juez de la Audiencia Nacional y actualmente Ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska. Esta tuvo lugar después de que se detectase que Pla regresó a ETA tras cumplir una pena de prisión en España por pertenencia al grupo criminal.

El ahora ministro señaló al exmiembro del «Comando Zaragoza» como enlace entre la estructura creada por la banda para gestionar todo lo relacionado con su colectivo de presos y el abogado Jon Enparantza. A este último lo arrestaron junto a los también letrados Arantza Zulueta e Iker Sarriegi.

De hecho, hace unos días quedaron en libertad los abogados Arantza Zulueta y Jon Enparantza. Estaban condenados por integración en ETA como miembros del «frente de makos», cumpliendo sus penas en las cárceles de Picassent (Valencia) y Estremera (Madrid), respectivamente.

COMITÉ EJECUTIVO DE ETA

Nacido en Pamplona en 1975, David Pla estaba considerado como uno de los integrantes del Comité Ejecutivo de ETA. Formó parte de la cúpula hasta que la banda certificó el fin de la actividad armada en octubre de 2011. Fue detenido en 2015 junto a Iratxe Sorzábal en el que fue el golpe más importante a la banda desde el alto al fuego.

Pla tuvo mucho que ver en la decisión de la organización terrorista de desarmarse. De hecho, fue uno de los encargados de leer los dos comunicados emitidos por ETA el 10 de enero y el 20 de octubre de 2011. En ellos se declaraba un alto al fuego permanente y el cese definitivo de la actividad armada, respectivamente.

Junto a la mencionada Iratxe, Pla formó parte de la delegación de la banda que trató de negociar sin éxito con el Gobierno español tras hacer oficial el abandono de la actividad terrorista. Además se les identificó como dos de los tres encapuchados que aparecieron en el vídeo del cese definitivo de la actividad criminal.

En 2012 se fueron a Noruega junto a «Josu Ternera». Lo hicieron para esperar que el Gobierno español enviase a una delegación para dar así comienzo a un proceso de negociación. Sin embargo, ante la negación a negociar del Gobierno de Mariano Rajoy, fueron expulsados del país escandinavo.

David Pla, exjefe de ETA, detenido por la Policía francesa en Hendaya
El arresto de David Pla se ha producido cuando este acudía a firmar a una comisaría de Hendaya, después de que en abril de 2019 fuese puesto en libertad condicional.

EN ETA DESDE LA DÉCADA DE LOS 90

El etarra comenzó su andadura en la izquierda abertzale a finales de los años 90. Lo hizo como integrante de la organización juvenil Jarrai, actualmente ilegalizada. También participó en el «Comando Nafarroa», que se desarticuló en 1994. En esta última operación se practicó un registro sobre su domicilio.

En julio de 2000 se le detuvo en Zaragoza junto a Aitor Lorente. El arresto tuvo lugar después de que los etarras estuvieran preparando un atentado contra el, por entonces, alcalde de Zaragoza, José Atarés (PP). En el registro del piso franco se localizó documentación y una bomba lapa preparada para su utilización.

Por este episodio se les condenó a una pena de prisión de 6 años. Fueron acusados por pertenencia a organización terrorista y falsedad documental.

Mientras estaba en prisión, David Pla fue vinculado con el asesinato del senador y presidente del Partido Popular aragonés, Manuel Giménez Abad (2001). Sin embargo, la Audiencia Nacional no encontró pruebas para su implicación en este crimen y por ello le puso en libertad en agosto de 2006, una vez cumplió su condena.

Abogado de profesión, el exjefe de ETA decidió poner rumbo a Francia, donde se convirtió en responsable de Halboka, el aparato de la banda que se dedica al apoyo de los presos. Su función era la de cohesionar a sus presos, siendo una parte fundamental de la organización terrorista.

DETENIDO EN HENDAYA EN 2010

Pla volvió a ser detenido en Hendaya en abril de 2010. Se le acusó de ser el máximo responsable de una red que hacía funciones de enlace entre la dirección de la banda y los presos. Apenas tres días después, ante la falta de pruebas, las autoridades francesas decidieron dejarle en libertad.

A partir de aquel momento, inició su periodo en la clandestinidad. Su misión fue poner fin al cierre de la organización criminal de ETA. De hecho, formó parte de las negociaciones de paz de Oslo junto a otros dirigentes de ETA. Sin embargo, al no haber avances para acabar con la violencia, se produjo su expulsión del país nórdico.

Su tercera detención se produjo el 22 de septiembre de 2015 junto a Iratxe Sorzabal. Esta operación se llevó a cabo entre la Guardia Civil y la policía francesa y tuvo lugar en Saint Étienne de Baigorry. Tras la actuación policial se dio por desarticulada la cúpula de la banda terrorista, que atravesaba uno de sus momentos más débiles.

LIBERTAD CONDICIONAL

David Pla formaba parte de la dirección del colectivo de presos de ETA (EPPK) desde octubre de 2018. Se le condenó a cinco años de prisión en febrero de 2019, pero cumplidos los cuatro años de condena abandonó la prisión francesa de Osny. Lo hizo en abril de 2019 en una situación de libertad bajo control judicial.

El pasado 20 de noviembre de 2019, la Justicia francesa aceptó su entrega a España en cumplimiento de una Euroorden que se emitió en el año 2011. Está acusado de pertenencia a organización terrorista. Este cargo podría suponer una pena de hasta 12 años de cárcel.