La Justicia de Murcia ha dado un portazo a la medida estrella de Vox en la comunidad: el pin parental. El Tribunal Superior de Justicia de Murcia ha suspendido este jueves la medida de forma cautelar porque considera que puede tratarse de un “perjuicio identificable” la posibilidad de que algunos alumnos no pueda realizar una actividad obligatoria y evaluable “por no autorizarlo sus padres.”
Esta medida judicial, que pone en tela de juicio la polémica iniciativa de Vox, no ha pillado por sorpresa a los padres de los alumnos afectados. “Esto ya sabíamos que se iba a producir”, dicen desde la Federación de AMPA del municipio de Murcia. Este veto parental ha estado implantándose en los últimos meses en la región murciana, pero a partir de ahora ya no podrá hacerse, al menos, de momento.
LA SENTENCIA CAUTELAR: NO AL PIN PARENTAL
La sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Murcia ha tomado esta decisión cautelar hasta conocer qué ocurre con el recurso que presentó el Gobierno central contra la medida. El Ministerio de Educación y Formación Profesional, que dirige Isabel Celaá se mostró muy crítico y contrario a la aprobación de este pin parental en la educación de Murcia. Por ello, y ante la negativa de suspenderlo, interpusieron un recurso ante el TSJMU.
La resolución de la Justicia de Murcia se tendrá que aplicar y afectará a la ejecución de dos instrucciones de la Secretaría General de la Consejería de Educación y Cultura de la Región de Murcia dictó para el curso 2019-2020. La norma iba dirigida tanto a los centros de Infantil y Primaria como a los de Secundaria y Bachiller y establecía que los padres debían dar una autorización expresa a sus hijos para que pudieran asistir a algunas de las actividades complementarias que establecían los centros públicos.
Para Vox, este pin parental era una medida indispensable para aprobar y apoyar el proyecto de PP y Ciudadanos para los presupuestos de la Región de Murcia. Es por ello que, tras formarse el gobierno de coalición —para el que necesitaron el voto de los ultraderechistas— la Consejería de Educación y Cultura de Murcia envió el pasado 29 de agosto una instrucción a todos los centros educativos en la que se explicaba que las familias podrían rechazar aquellas actividades extracurriculares «que vayan a ser impartidas por personas ajenas al claustro del centro educativo.
El veto, que ha estado en funcionamiento desde el inicio de curso, ha sido fuertemente criticado por el Gobierno, que no ha dudado en llevarlo a la Justicia alegando que no es constitucional. En palabras de la ministra de Educación, “esta medida vulnera el derecho de los alumnos a recibir una educación integral en el respeto a las libertades fundamentales y excede las competencias de los centros educativos”.
LOS PADRES YA SE LO ESPERABAN
Los padres de los niños a los que afectaba el pin parental reconocen que ya sabían que esto podía pasar. Desde la Federación de AMPAS del municipio de Murcia afirman a MONCLOA.COM que esto no les ha sorprendido, aunque insisten en que todavía “es cautelar” y lamentan que no deja de ser “una parte del juego político”. En su asociación reconocen que las opiniones están muy polarizadas entorno a este tema. “Un 60 % de los inscritos en el AMPA están en contra de la medida, mientras que un 40 % sí apoyaban el pin parental”, enumeran.
A pesar de esta disparidad dentro de los asociados, la Federación reconoce que este veto educativo “no estaba bien visto” por la dirección, porque había niños que se quedaban fuera de algunas charlas o talleres por descuido al no presentar la autorización. Además, recuerdan que este pin parental no es necesario porque actualmente “hay información de todo lo que se da en estos centros” antes de que empiece el curso.
El pin parental, en un principio, fue demandado por Vox porque no querían que a sus hijos “les adoctrinaran” con diferentes charlas y talleres, por ejemplo, centrados en ideología de género. Sin embargo, esta medida ya afectaba a cualquier otro tema. En esta comunidad se han dado situaciones atípicas a costa de este veto. Una de ellas fue que ocho alumnos se quedaron sin asistir a un curso sobre reciclaje porque sus padres no lo permitieron. En otras casos, incluso, se ha fomentado las pellas entre los estudiantes, que no entregan la autorización a sus progenitores y como consecuencia no tenían que asistir a estas clases extraescolares.
Ahora, la decisión de la Justicia de Murcia parará momentáneamente estas situaciones hasta que haya una orden definitiva que podría servir de precedente para otras comunidades. Madrid sería una de ellas, donde Vox, que también sustenta al gobierno autonómico, ya ha presionado para que se ponga en marcha el pin parental o amenaza con no aprobar los presupuestos.